Según la cabildante indígena, Ati Quigua, la implementación de los productos tradicionales andinos tanto en el agro como en la alimentación de los bogotanos, no es un capricho o necedad de ella, es la solución alto índice de desnutrición de los niños y las personas más pobres de la capital, ya que la quinua, el amaranto y la kiwicha, hacen parte de los 36 productos vegetales más completos para la alimentación humana. Estos cultivos se hacen de manera orgánica y poseen una carga nutricional más alta que otros empleados en la dieta de los colombianos como el maíz, el trigo, el arroz, la avena, aún superior a la misma soya.

El Nuevo Siglo/ 19-07-06 sección A. Política Bogotá. Breve. Página 8.