El propósito de este trabajo de investigación es analizar detenidamente el problema de planificación que ha tenido la educación diseñada para la diversidad étnica de este país, en una primera parte pretendo hacer un análisis descriptivo de lo que ha sido la política educativa oficial con respecto a los pueblos indígenas a lo largo de la historia y en una segunda parte posterior a un breve diagnóstico de la problemática educativa indígena actual, una síntesis propositiva de lo que conceptualmente podría determinarse educación indígena y luego como tercer punto, un informe de ejecución de acciones y recursos del programa nacional de etnoeducación indígena 1992 – 2001 y como cuarto punto la planeación de la calidad, cobertura, equidad y pertinencia del sistema educativo en los grupos étnicos.
En la última parte de esta investigación se encontrarán las respectivas conclusiones.
EL OBJETO de mi trabajo es, encontrar argumentos que me permitan determinar si la política educativa oficial de Colombia referente a las culturas indígenas que en ella residen, desde el año 1976 a partir de las cuales se puede hablar de etnoeduación, cuando por primera vez el estado, con la expedición del decreto 088, en su artículo 11 establece que “los programas regulares para la educación de las comunidades indígenas tendrán en cuenta su realidad antropológica y fomentarán la conservación y la divulgación de sus culturas autóctonas”, hasta nuestros días, ha dispuesto de un mecanismo de planificación adecuado y cual es el proceso de planeación del sector educación para la población indígena actualmente.
LA TESIS que me planteo es:
“Colombia ha implementado métodos de planeación muy oportunos con su propósito de construir un país democrático y participativo pero, aunque es un proceso muy reciente para evaluar sus resultados en un sector tan complejo como es el diseño de la educación para la población indígena, nada indica que la educación del estado haya dejado de ser una forma de integrar a un “salvaje” a la vida civil.”
I. PLANIFICACION DE LA POLÍTICA EDUCATIVA DEL ESTADO PARA LOS PUEBLOS INDIGENAS DE COLOMBIA
Con esta denominación me refiero a la política oficial del estado colombiano en relación con la educación de los grupos étnicos y por extensión a los procesos educativos desarrollados bajo el marco legal de las misma.
Se puede hablar de etnoeducación a partir del año 1976, cuando por primera vez el estado, con la expedición del decreto 088, en su artículo 11 establece que “1os programas regulares para la educación de las comunidades indígenas tendrán en cuenta su realidad antropológica y fomentaran la conservación y la divulgación de sus culturas autóctonas". Antes de este año nada indica que se hayan tenido en cuenta las particularidades culturales existentes en el territorio nacional.
Antecedentes
Desde finales del siglo XIX el servicio de educación ofrecido por el estado para las comunidades indígenas estuvo a cargo de la iglesia católica. Esto con fundamento al concordato de 1986 celebrado entre representantes de las misiones católicas y el estado colombiano; a través del cual este último les otorga la administración y la dirección de los centros educativos de los territorios indígenas.
Esta educación se enmarcó en la política del estado, hasta 1958 de reducir "las tribus salvajes a la vida civilizada" y de allí hasta finales de la década del 70 de integrar a los indígenas a la vida nacional en términos de producción y de desarrollo. Se aplicaron los mismos programas educativos diseñados para todo el país con una predominante orientación religiosa promovida por las misiones.
Los pueblos indígenas por su parte, si bien veían en la educación escolar la opción para adquirir los conocimientos básicos, especialmente de español y matemáticas, para el desenvolvimiento frente a la sociedad que loS rodeaba, de diferentes maneras manifestaron también de manera muy reiterada su preocupación frente a la formación religiosa y a los nuevos hábitos inculcados a los estudiantes, pues no tardaron en manifestarse las primeras transformaciones culturales entre sus miembros educados por aquel sistema.
A partir del año 1978, con la expedición del decreto 1142 (reglamentario del artículo 11 del decreto Ley 088 de 1976), el cual otorga a las comunidades entre otros derechos, a participar en el control de los procesos, en el diseño y evaluación de currículos, a la alfabetización en la lengua materna, al desarrollo de las tecnologías autóctonas, etc. Empiezan a consolidarse algunas experiencias educativas forjadas al interior de algunas comunidades nativas, que buscaban amoldar la educación ofrecida por el Estado a la realidad socio - cultural de las mismas.
IA. DESARROLLO DE PROGRAMAS DE ETNOEDUCACIÓN
Por diversos factores la consolidación de programas educativos fundamentados en esta nueva reglamentación fue lenta. En muchas comunidades no se conoció la norma sino después de varios años; en otras no se estaba preparado para ejercer dicho derecho ni se contaba con ningún tipo de asesoría; en otras esta nueva concepción de la educación poco o nada interesó a las misiones religiosas que tenían a cargo la educación. A esto hay que agregar que los centros de educación formal de las comunidades indígenas no han sido ajenos a las deficiencias de recursos que han afectado a las escuelas de las regiones apartadas del país; siendo la situación más crítica aún, ya que los materiales que ocasionalmente venían siendo distribuidos a los centros educativos no eran apropiados para el medio cultural ni existía apoyo para la producción de materiales propios.
Posteriormente, en 1984, se expide la resolución 3454 que crea el programa de Etnoeducación dentro del Ministerio de Educación nacional; el cual se encargaría en lo sucesivo del diseño de las políticas etnoeducativas, y la orientación, la promoción y la aplicación de las mismas en los territorios indígenas.
Con el programa de etnoeducacíón del Ministerio de educación Nacional se avanza significativamente en la definición y consolidación de los lineamientos de Etnoeducación. Esta se define entonces como "un proceso social permanente inmerso en la cultura propia, que consiste en la adquisición de conocimientos y valores y el desarrollo de habilidades y destrezas, que capacita a la persona para participar plenamente en el control cultural de su continuidad" (Fuero indígena colombiano, Presidencia de la República, Bogotá, 1990).
Se atribuye al mismo tiempo a la Etnoeducación las siguientes características: BILINGÜE, INTERCULTURAL, PARTICIPATIVA, FLEXIBLE Y SISTEMÁTICA, PERMANENTE. ( conceptualización y ensayo MEN).
En cuanto al rol que debe jugar la escuela en las comunidades indígenas, la política etnoeducativa plantea su transformación en el sentido de "quitarle su carácter de agencia de control simbólico, para convertirla en una institución GENERADORA de nuevos ORDENES EXPRESIVOS que respeten tanto la individualidad, como los colectivos culturales". (Etnoeducacíón, conceptualización y ensayos. Página 228).
La actividad etnoeducativa en las comunidades indígenas cumple requisitos estipulados por la Secretaría de Educación, según los cuales, las escuelas deben acogerse a un calendario escolar, desarrollar las determinadas "áreas básicas del conocimiento", tener una programación a desarrollar durante el año escolar y cubrir un número mínimo de horas anuales, llevar los registros académicos reglamentarios y otros requisitos que son los que garantizan a las instituciones del Estado, un normal desarrollo académico y administrativo de la actividad escolar y conducen a un buen rendimiento.
En general se observa que mientras las instituciones ancestrales, si así se les puede llamar, de formación especial se debilitan de manera progresiva la educación escolar gana espacios.
El surgimiento de la Constitución del 1991, se ganaron nuevas expectativas en virtud de postulados contenidos en ella, como los siguientes:
El Estado colombiano reconoce y protege la diversidad étnica cultural de la nación colombiana. (Articulo 7).
Las lenguas y dialectos de los grupos étnicos (al igual que el idioma castellano) son oficiales en sus territorios. La enseñanza que se imparta en comunidades con tradiciones lingüísticas propias será bilingüe ( Artículo 10).
El Estado garantiza las libertades de enseñanza, aprendizaje, investigación y cátedra. (Artículo 27).
Los integrantes de los grupos étnicos tendrán derecho a una formación que respete y desarrolle su identidad cultural (Artículo 68).
Las experiencias educativas en los centros de educación superior , se han apreciado en el surgimiento de acuerdos, convenios y acciones por parte de los estamentos educativos de nivel superior que toman en cuenta la diversidad étnica y cultural del país, y que se han traducido esencialmente en aumentar las posibilidades de ingreso de estudiantes indígenas a universidades e institutos y en la apertura de programas de licenciatura concernientes a la Etnoeducación.
Dichos proyectos se están desarrollando en diferentes espacios educativos escolarizados y no organizados, organizaciones comunitarias, ONG"s, escuelas, colegios y diferentes universidades. Es así como en Colombia, desde el año 1995, algunas instituciones de educación superior asumieron el reto de construir curriculos en torno a la Etnoeducación hacia una propuesta académica alternativa desde el punto de vista pedagógico, metodológico y político, ofreciendo estrategias de formación para docentes y líderes comunitarios a partir de una nueva mirada académica e institucional.
Por esta razón y debido a la necesidad de espacios para compartir y confrontar experiencias sobre esta nueva práctica educativa en diferentes contextos y principalmente con jóvenes universitarios, en el año 1998 la Universidad de la Guajira organiza el primer congreso universitario de etnoeducación en Colombia. En aquel momento se reunieron diferentes universidades, organizaciones e instituciones, que analizaron temas específicos relacionados con el que hacer de la Etnocultura en Colombia, tales como: oralidad y escritura, relaciones entre ciencias, saber tradicional y etnociencia, etc.
Ante la necesidad de dar continuidad este tipo de eventos la Universidad del Cauca asume el compromiso de realizar el segundo congreso. De este segundo congreso además de propuestas temáticas de Etnocultura se presentan propuestas institucionales que se trabajaran sobre los principales avances y requerimientos en materia de política institucional, tanto en el ámbito estatal como privado.