Se desarrolló en el salón Elíptico del Capitolio Nacional el Foro sobre Política Nacional de Drogas, organizado por la Cámara de Representantes y coordinado por el Representante por el Guaviare, Pedro José Arenas, con el objetivo de reanimar la discusión pública en torno al tema. En el evento se discutió la política pública antidrogas, y alternativas frente al problema de los cultivos de uso ilícito, las fumigaciones y la representación que para los pueblos indígenas tienen las plantas.
La principal conclusión del evento, que contó con la participación de asociaciones campesinas, la Sociedad Agraria, representantes del Concejo Regional Indígena del Vaupés (CRIVA) y de la Organización de Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana (OPIAC), fue el rechazo enfático a la actual política antidrogas, pues el resultado de las fumigaciones también ha sido la generación de serios problemas ambientales, desplazamientos masivos, deterioro sociocultural.
“Esta política ha sido un completo fracaso, y esto se comprueba con el traslado de los cultivo de uso ilícito a departamentos donde no hay fumigaciones, como es el caso del Putumayo, que cuando se fumigó, los cultivos se trasladaron al departamento de Nariño”, aseguró Guillermo Carmona de la Sociedad Agraria.
De igual forma, se planteo la falta de un Sistema de Prevención Nacional para el uso de sustancias alucinógenas, como también de una política de drogas “que no sea represiva, en especial con los primeros eslabones de la cadena productiva como lo son los campesinos e indígenas”, sostuvo el Representante a la Cámara Pedro Arenas.
Por su parte, para el dirigente indígena Angel Lozano, miembro del CRIVA, la actual política no reconoce la importancia que las plantas tienen para los pueblos indígenas. “En lo cultural, los pueblos indígenas amazónicos se reconocen como pertenecientes a cinco grandes grupos complejos: el de la coca y el tabaco, el de la coca y el ambil, el del yagé, el del yuruparí y el de los pueblos de yopo. Estas tradiciones míticas y rituales nos permiten conservar nuestras costumbres, nuestro idioma y nuestro mundo”, quien también señaló que no es posible estigmatizar a los indígenas porque en sus chagras se cultiva una planta que hace parte del quehacer cultural. “Vivimos donde nace la mata de la coca, en nuestros resguardos, donde nos hemos asentado ancestralmente ¿cuántos indígenas multimillonarios en dólares hay en la amazonía colombiana?”.
De esa perspectiva, los indígenas exigieron del gobierno central:
a) mayor inversión social en la amazonía
b) cumplir con la con la consulta previa
c) mejorar las relaciones del Estado con las comunidades indígenas
c) que se haga viable el fallo de la Corte Constitucional, Expediente T.517583.
El debate también planteó como la actual política de drogas “golpea y judicializa a los más vulnerables, a los pequeños productores, quines no reciben ni el 1% del valor en que se comercializa el producto final”.
Es por esto que, el Representante Pedro José Arenas, en conjunto con organizaciones sociales e indígenas del Cauca, consideran necesario radicar un proyecto de ley tendiente a descriminalizar la tenencia de arbustos de coca y su consumo, en su estado natural, cuando está destinado a la práctica del mambeo y cuando su uso medicinal, pues no se puede considerar el yagé, por ejemplo, como un proceso industrial.