El crimen
Los hechos ocurrieron el dÃa 14 de mayo, cuando el comunero Enrique Escué departÃa con otros comuneros en una fiesta veredal de la comunidad del BerlÃn, resguardo y municipio de ToribÃo.
Eran cerca de las 3:00 de la madrugada cuando el comunero salió para su casa, ubicada a 100 metros del sitio de integración. Al llegar a su vivienda, precisamente en su habitación, fue agredido con arma blanca por un desconocido, que le causó múltiples heridas y quién huyó dejando sin vida a Enrique Escué en su propia vivienda.
La investigación
Luego del levantamiento del cadáver en la casa del comunero asesinado, el Cabildo como Autoridad Tradicional, inició una investigación donde las principales sospechas recaìan sobre la esposa del asesinado y sobre el exgobernador Ismael Ùl, porque según varias personas en la comunidad los habÃan visto juntos desde tiempo atrás y estaban seguros de que sostenÃan una relación sentimental.
Fueron estos comentarios los que llevaron a que la directiva del Cabildo y el Grupo JurÃdico, realizaran la respectiva indagatoria con los sospechosos, quiénes al principio negaron el crimen. Pero después de que el Comité de Investigación recogió las pruebas y presentó testigos, la comunera Lucrecia Medina reconoció el homicidio, acusando como autor material a Ismael Ùl, quién al ser retenido aceptó el crimen perpetrado contra Enrique Escué.
Fue asà que luego de un mes y medio de investigación, el cabildo halló culpables del asesinato de Enrique Escué, a los comuneros Lucrecia Medina e Ismael Ùl. Quiénes fueron presentados en Asamblea Pública el pasado 21 de junio de 2009, en el casco urbano de San Francisco para la aplicación del remedio y de la respectiva sanción según usos y costumbres, asà como la Constitución Nacional en el artÃculo 246.
El remedio
El dÃa domingo 21 de junio, llegó la comunidad al casco urbano de San Francisco, respondiendo a la convocatoria de la directiva del cabildo, encabeza de la gobernadora MarÃa Dominga Mestizo, quién en dÃas anteriores habÃa citado a Asamblea Pública para la aplicación de remedio y para dar la sanción correspondiente a los dos comuneros, responsables de la muerte de Enrique Escué.
Al inicio de la asamblea la comunidad escuchó detenidamente el resultado de las investigaciones emitido por el grupo de Investigación del cabildo, donde relataron cómo habÃa sido asesinado el comunero y cómo lograron recoger las pruebas que llevaron a la condena de los comuneros implicados. En la asamblea, también los culpables del homicidio, tuvieron espacio para dirigirse a la comunidad, a familiares y a defensores. De igual manera, los familiares de la vÃctima tuvieron tiempo para la réplica.
La sanción
Como es tradicional en las asambleas comunitarias, la comunidad tuvo la palabra a través del trabajo en comisiones, desde donde salen la mayorÃa de decisiones para beneficio de las mismas. Entonces, después del análisis y la reflexión, dictaron la sanción de remedio para los dos comuneros.
Al final del trabajo en comisiones, se recogió el veriedicto emitido por la comunidad en coordinación con la directiva del cabildo, que decidió darles 40 fuetazos y 30 años de cárcel a Marina y a Isamel, por el homicidio de Enrique. Seguidamente, los alguaciles del cabildo aplicaron el remedio a los dos comuneros.
"Felicito a la comunidad por la decisión tomada y reconozco el error cometido, pero aclaro que no fue el cabildo que cometió el error, sino yo como persona y comunero, fui quien lo hizo", fueron las palabras que dio el exgobernador al caer la tarde y al dar por terminada la Asamblea Pública. También aconsejó continuar con el proceso de control por parte del cabildo y la justa aplicación a los comuneros de su parcialidad.