Entre enero y julio de 2009 se han desmovilizado veintidós indígenas de la etnia Embera que estaban vinculados al frente 34 de las Farc, que opera en el occidente de Antioquia, informó la OIA.
Los indígenas se desomovilizaron de las cuadrillas a las que estaban vinculados por presiones territoriales del grupo subversivo o "engañados por un discurso de mentiras o buscando mejores oportunidades". Así lo reveló a los medios de comunicación William Carupia, director de la Organización Indígena de Antioquia, OIA.
Entre estos indígenas que desempeñaban labores de combate y de apoyo logístico, se encuentran dos mujeres de 22 y 35 años, quienes no alcanzaron a cumplir 5 años con el grupo revolucionario. También desertó un comandante que llevaba allí 18 años.
Esta desmovilización fue informada hasta ahora por la OIA con el fin de evitar represalias por parte de las Farc contra los indígenas que aún no se habían desmovilizado.
Los desertores en este momento se encuentran bajo protección de la guardia indígena y esperan que el próximo 25 de agosto se haga su reintegración a la vida de su comunidad a través de una ceremonia. Se confía la participación del Ministerio de Defensa, la Gobernación de Antioquia, la Defensoría del pueblo y garantes internacionales.
"Esta desmovilización es muy esperanzadora porque se abre el camino para muchos otros indígenas vinculados de manera forzada a la guerra", puntualizó ante la prensa, Carlos Salazar, gerente de asuntos indígenas de la Gobernación de Antioquia.
