La concejala indígena Ati Quigua, pedirá a la Secretaría de Salud, de Educación y al DAMA, mediante proposición radicada hoy en la Comisión del Plan, que informen al Concejo de Bogotá y a la comunidad en general, si se hizo un estudio  y se tomaron las medidas necesarias para evitar el impacto social, que causará a los habitantes de las zonas circunvecinas del botadero, arrojar las basuras de Cundinamarca en el Relleno Sanitario de Doña Juana, 600 toneladas diarias, a partir del próximo 3 de octubre.

Según la cabildante, que hace menos de ocho días, visitó los lugares aledaños al botadero, barrios Mochuelos y las Quibas, en donde encontró que la gente tiene que convivir con la proliferación de insectos y roedores; los niños que se educan en cercanías a este sitio, mantienen con enfermedades en la piel. Además, tienen que ir a estudiar con tapabocas, debido a los olores nauseabundos que deben soportar a diario. Este problema se viene presentando por las basuras que allí se depositan de Bogotá, ¿cuál sería el impacto a nivel de la comunidad, cuando se empiece a traer las basuras de Cundinamarca?