La llegada de Ati Quigua al Concejo de Bógotá, no es fortuita, ella tiene una misión de vida que debe desarrollar en la ciudad, y esa es visibilizar sus prácticas culturales y ambientales en una propuesta de Comunidad Sostenible, por eso no es raro escucharla hablando de la importancia del ambiente, del agua, de la tierra y de su gente; lo que la ha motivado a presentar Proyectos de Acuerdo, debates de Control Político y proposiciones en caminadas a la protección y defensa de estos temas.

El alto grado de contaminación ambiental de la ciudad, sumado al daño que han sufrido los Cerros Orientales y la cultura del desperdicio del agua de los ciudadanos, motivaron a esta joven mujer indígena a radicar dos Proyectos de Acuerdo, el Estatuto del Agua para Bogotá y la incorporación de la Estructura Ecológica Principal y sus componentes, al Acuerdo 19 que trata sobre Protección General Ambiental de la ciudad, iniciativas con las que Ati Quigua, dejará el mejor de sus pensamientos como herramienta para la protección y defensa ambiental de la capital.

DAMA y comunidad velarán por ambiente de la ciudad

Pese a qué la ciudad posee una norma que protege su ambiente desde 1996, en ella, no se contempla la Estructura Ecológica Principal y sus componentes: sistema de áreas protegidas, parques urbanos, corredores ecológicos y área de manejo especial del río Bogotá, lo que motivo a la concejala Quigua, a presentar un Proyecto de Acuerdo mediante el se incorporen estas zonas, con lo que se da herramientas jurídicas al DAMA para su defensa, adecuado manejo y la restauración ambiental de estos sitios de la capital.

Para la cabildante, el Acuerdo 19, se hallaba cojo, pues al no estar contempladas estas zonas, más de 800 hectáreas de la Estructura Ecológica de la ciudad se han destruido, ejemplo de ello son las 30 licencias expedidas por las curadurías urbanas en los cerros orientales, la incorporación de 21 predios en la zonas de reserva por parte de Planeación Distrital, como también el escaso control del impacto ambiental que genera la explotación minera en la cuenca del río Tunjuelo.

Con la aprobación de esta iniciativa, se fortalecerá a la autoridad ambiental distrital- el DAMA- para acabar con la expedición de licencias en lugares ubicados en la Estructura Ecológica Principal y así evitar el relleno de los humedales para la construcción de viviendas, la venta de terrenos en las rondas de los ríos, lo que en época de invierno genera inundaciones y la perdida de vidas humanas. Además, se contará con la intervención de la comunidad, representada por 8 delegados ambientales territoriales, 1 representante de las comunidades indígenas y 1 de los afro descendientes, quienes tendrán que velar por la preservación del sector ambiental de cada localidad.

Bogotá contará con un Estatuto para la defensa de su Agua

Este Proyecto promueve una transformación de la cultura del Agua en la ciudad y su entorno, dirigida a recuperar el sentido de elemento dador de vida, que ha mantenido entre los pueblos originarios de América y en particular entre los muiscas y otros pueblos originarios del norte de los Andes. Una cultura en la cual el agua vuelva a ser entendida como el elemento del que depende el equilibrio -la salud- del territorio y de cada ser que lo habita, de manera que se le reconozca su carácter sagrado en tanto que primordial para la vida.

Además de su democratización, lo que significa que las decisiones en la planeación, manejo y uso del agua no se limiten a entidades del distrito, sino que la ciudadanía tenga la posibilidad de ser consultada y convocada a participar en la formulación de políticas públicas, planes, programas y proyectos relacionados con el ciclo natural del agua en Bogotá.

Para Ati Quigua, el que Bogotá adopte un régimen jurídico exclusivo para este preciado líquido como bien público, con el cual se pretende planificar y administrar el recurso hídrico de la ciudad; su protección, mecanismos para su aprovechamiento y propiciar una cultura para su defensa, debe convertirse en una prioridad.

Según la cabildante, pese a que la ciudad posee normas que le han permitido avanzar en el manejo de su recurso hídrico, estas no han sido suficientes, pues carece de una estructura para la conducción integral del tema, que quedará plasmada en su Proyecto de Acuerdo 258 “Por el cual se adopta el Estatuto del agua en Bogotá”, en el cual se agrupan y priorizan las acciones que en esta materia debe tomar la capital.

Igualmente, dijo que la cultura del agua se debe institucionalizar desde los colegios, y la gestión ambiental de la ciudad, a través de los Proyectos ambientales escolares, PRAES, los proyectos ambientales universitarios, PRAUS, los proyectos comunitarios de educación ambiental, PROCEDAS, entre otros. Lo que cambiará las costumbres de la conciencia colectiva sobre el manejo del ciclo natural del agua y su concepción desperdicio.

También, indicó que: “el Estatuto del Agua esta compuesto por diez títulos y 23 artículos, dado su grado de complejidad e importancia para el tema”.

-COMPONENTES Y DEFINICIONES

-POLÍTICA PÚBLICA DEL AGUA

-COMITE DISTRITAL DEL AGUA –COMDIA

-CULTURA DEL AGUA

-USO DEL AGUA EN EL DISTRITO CAPITAL

-CALIDAD Y TRATAMIENTO

-GESTIÓN DEL AGUA EN EL DISTRITO CAPITAL

-PARTICIPACIÓN Y DESARROLLO EMPRESARIAL

-CUENCAS COMPARTIDAS

-OTRAS DISPOSICIONES

Finalmente, aseguró que esta muy pendiente de los debates de control político que va adelantar sobre los siguientes temas: - “Impacto de la entrega en concesión del Parque Chingaza ¿En qué consiste la propuesta de entregar en concesión el Parque Nacional Chingaza? ¿Cuáles son los fundamentos Constitucionales y legales para la entrega en concesión del Parque? Y - “Análisis de los estudios que se han adelantado directamente o contratado en los últimos 15 años, sobre vegetación de los cerros orientales, características y resultados de dichas investigaciones”

“porque somos gotas de un mismo río”

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