Ante la presión y resistencia que ejercieron las comunidades indígenas del norte del Cauca, insurgentes de las FARC EP no tuvieron más remedio que devolver al alcalde retenido 10 horas antes, tras haber participado en el Consejo Comunitario de Gobierno que se desarrolló el pasado sábado en la ciudad de Popayán.
A las 9 de la noche el Taita Segundo Tombé Morales, alcalde municipal de Silvia (Cauca), regresaba a su casa en compañía de su esposa y sus tres hijos luego de participar en el Consejo Comunitario de Gobierno que se llevó a cabo en Popayán con la presencia del presidente Álvaro Uribe Vélez. Muy cerca de la población, el alcalde y su familia fueron detenidos por hombres armados que llevaban brazaletes de las FARC EP, intimidaron al dirigente y los secuestraron a todos.
“Nos tuvieron dando vueltas por más de tres horas. No nos decían nada, ni daban explicaciones del por qué del secuestro. En la madrugada nos detuvimos en un campamento de las FARC EP, ubicado precisamente en resguardo Páez de Quinchaya, a una hora de Silvia. Una mujer indígena se percató del secuestro e inmediatamente dio la alerta a toda la comunidad. La gente comenzó a llegar y rodearon el lugar donde me tenían retenido. Eran como las cinco de la mañana. El Cabildo habló con los guerrilleros para que me soltaran. Mientras tanto yo les decía a mis captores que no tenían ni idea en el problema que se habían metido con la comunidad por haberme retenido” relató para Actualidad Étnica el taita Tombé.
De acuerdo con el alcalde indígena, a las 7 de la mañana fue liberado en compañía de su mujer y sus tres hijos, uno de ellos un menor de edad de tan solo tres años de edad.
“Aunque la comunidad de Quinchaya es Páez (donde habitan por lo menos unas 2 mil familias) y yo soy Guambiano, el espíritu de solidaridad y resistencia, que ha caracterizado a las comunidades indígenas del departamento de Cauca, confluyó para que este grupo alzado en armas no me secuestrara. La guardia indígena y la comunidad presionaron pacíficamente a las FARC EP para que me devolvieran. Los guerrilleros no tuvieron más que hacerlo, porque se estaban metiendo en un problema muy grande”
María Teresa Qelal, esposa del alcalde, sostuvo que su esposo seguirá trabajando como lo ha hecho siempre. “Él no recibió ninguna amenaza, ninguna advertencia y lo único que le quitaron fue el carro perteneciente a la alcaldía. Tampoco sabemos cuál fue el motivo del secuestro. No obstante, él puso la denuncia pertinente en la Fiscalía y ahora esperar qué refuerzos de seguridad nos otorgan”
Finalizado el episodio, el alcalde y su familia fueron conducidos por una ambulancia hasta el municipio de Silvia, donde la comunidad lo recibió con aplausos y vivas. El Cabildo organizó un desayuno de bienvenida.
El frustrado secuestro del alcalde de Silvia motivó al gobernador del Cauca, taita Floro Alberto Tunubalá, a adelantar un Consejo de Seguridad. “En el Consejo se decidirá qué hacer con la situación de los alcaldes del departamento. Hasta el momento se han tomado medidas especiales en las carreteras principales por la afluencia turística propia de Semana Santa”, aseguró Tunubalá.