Difícil sigue siendo la situación de la comunidad indígena Zenú Mango – Volcán de Los Aburridos, asentada en el municipio de Turbo, luego de la explosión producida el pasado domingo en la madrugada del volcán que lleva el mismo nombre de la comunidad.
La larga mancha de lodo gris, provocada por la avalancha que curiosamente no tocó ninguna de las viviendas del resguardo, se extiende a lo largo de 40 hectáreas de cultivos de pan coger, tapando con su intenso olor las plantaciones de arroz, maíz, plátano, yuca y ñame, además de dejar sepultadas a 60 reses que se hallaban en la finca campano – bonito.
Para Manuel Enrique Flórez, gobernador de la comunidad, la principal urgencia se concentra en recibir apoyo humanitario por parte de la Gobernación de Antioquia, ya que se requiere comida, atención médica – para enfrentar los efectos producidos por el lodo y el azufre – y maquinaria - retroexcavadoras, volquetas y un cargador - para remover las toneladas de lodo que taponan la carretera, impidiendo la comunicación con los municipios de Necoclí y San Pedro de Urabá.
De acuerdo con las autoridades locales de Turbo, una de las acciones más urgentes está en que los geólogos y expertos determinen la gravedad de la situación y puedan establecer la situación de riesgo en la que se encuentran los pobladores del lugar, ya que la zona es catalogada como zona volcánica, incluyendo los municipios de Necoclí y Arboletes.
.
