En declaración al presidente Álvaro Uribe, las Autoridades del pueblo indígena Arhuaco le reiteran la cruel situación de orden público, las amenazas, las intimidaciones, los desplazamientos, el bloqueo de alimentos y medicinas, las desapariciones y, en especial, los asesinatos, a los que ha sido sometido este pueblo, como también Kankuamos, Wiwas y Koguis de la Sierra Nevada de Santa Marta, a manos de los grupos alzados en armas, en especial a manos de paramilitares de las autodefensas unidas de Colombia (AUC).
El documento es el resultado de una serie de reflexiones hechas en el territorio indígena denominado Nabusímake, durante una Asamblea General realizada entre el 10 y 17 de diciembre, la cual contó con la participación de los Mamos, Autoridades y miembros de las 42 asentamientos que conforman el Territorio Arhuaco.
De igual forma, instaron al gobierno nacional ha facilitar los mecanismos necesario para que se respeten los derechos ancestrales de estos pueblos, sumidos en el abandono y la guerra sin cuartel.
Actualidad Étnica presenta el documento completo, en el cual, las autoridades del pueblos Arhuaco describen detalladamente los actos de violencia que se han cometido contra esta comunidad.
DECLARACIÓN
DEL PUEBLO INDÍGENA ARHUACO PARA EL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA DOCTOR ALVARO URIBE VÉLEZ Y DEMÁS ORGANISMOS NACIONALES E INTERNACIONALES ANTE LA VIOLACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS EN NUESTRO TERRITORIO QUE ES
RESPONSABILIDAD DEL GOBIERNO COLOMBIANO.
En Asamblea realizada en Nabusímake, Territorio Arhuaco, del 10 al 17 de diciembre de 2003, donde se contó con la participación de los Mamos, Autoridades y miembros de las 42 asentamientos que conforman el Territorio Arhuaco, se hizo el análisis de la situación actual que estamos atravesando y con base en las distintas opiniones y manifestaciones con los acontecimientos que afectan desfavorablemente nuestra Organización y la vida comunitaria, expresamos:
El Pueblo Arhuaco ha existido desde tiempos inmemorables en este territorio que nos dejaron nuestros padres y madres espirituales, para cumplir con las Leyes y velar por el equilibrio de la madre naturaleza y la relación que debemos tener con ella , como Indígenas.
Los Arhuacos somos pacíficos y tenemos un alto concepto del respeto a la vida de convivencia y armonía; entre todos los seres de la Naturaleza.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, el Pueblo Arhuaco con profundo sentimiento de dolor y consternados por los hechos de violencia y terror que viene amenazando a nuestras familias, rechazamos enérgicamente los asesinatos de nuestros hermanos miembros de la comunidad de Jugaka.
JULIÁN CRESPO y DWYARUSINGUMU ARROYO , cometido por un grupo armado que se identificó como de las Autodefensas Unidas de Colombia que opera en la zona (A.U.C), el día 26 de Noviembre de 2003; HÉCTOR NICOLÁS IZQUIERDO NIÑO Y MARCOS FIDEL IZQUIERDO NIÑO , por soldados campesinos del Ejercito Nacional, el día 16 de julio de 2003 en el Municipio de Pueblo Bello (Cesar); MARIA VERÓNICA IZQUIERDO, hecho cometido por un grupo armado, en la vía que conduce de Bosconia a Santa Marta (Magdalena ) el día 16 de Julio de 2002; ARNULFO MEJIA MEDINA cometido en una finca ubicada en el Municipio del Copey.
Atribuimos también a los grupos armados la desaparición forzosa de CLAUDIO CELEDÓN , en la vía la honda que conduce a la comunidad de Karwa ( Territorio Arhuaco) el día 8 de Junio de 2003 y la desaparición del indígena Arhuaco, JAVIER MONTERO CRESPO perteneciente a la comunidad de Izrwa (Territorio Arhuaco).
Por otro lado rechazamos los asesinatos de otras personas no indígenas, que convivían con familias de la Comunidad y prestaban sus servicios a la organización y a las comunidades, ellos son:
HÉCTOR DIEGO GARCÍA LONDOÑO , cometido el día 15 de Noviembre de 2003 en la vía que conduce a Sabana Crespo, sobre el sitio conocido como el Reposo, este hecho se le atribuye a uno de los grupos armados que opera en la zona; FERNANDO GIRALDO Y JESÚS CAMARGO ultimados en la región de Ga´muke ubicada en la zona suroccidental del Resguardo Arhuaco el día 3 de Mayo de 2003.
De la misma manera rechazamos y censuramos todas las acciones de violencia, y actos delictivos como son los secuestros, asesinatos , maltratos físicos y sicológicos, señalamientos, detenciones arbitrarias, robo y hurtos de nuestros bienes, etc, cometidos por grupos armados ilegales, y en muchas ocasiones por miembros del Ejercito Nacional que se han empeñado en no dejarnos vivir en Paz, por los combates, los entrenamientos, los bombardeos, que dejan como resultado la contaminación del medio ambiente en nuestro territorio.
Esto ha venido sucediendo desde hace muchos años, y en la actualidad estamos pasando por unos momentos aún más difíciles, donde el Estado y el Gobierno Nacional departamental y municipal, tienen la responsabilidad de velar por la Honra, Vida y Bienes de todos los Colombianos incluida la obligatoriedad de proteger la Diversidad étnica y Cultural del país. (C .P Art. Y 7 ).
Nosotros, los indígenas Arhuacos de la Sierra Nevada de Santa Marta desde que los grupos armados ingresaron a nuestro Territorio, hemos venido expresando nuestro rechazo frente a este conflicto y también hemos sugerido al Estado la salida negociada con el fin de evitar confrontaciones en nuestro territorio. No somos gente para la guerra, por eso no aceptamos y repudiamos la incorporación de miembros de la comunidad a los grupos armados y al ejercito nacional, ya que estos son entrenados y utilizados para realizar señalamientos a personas de su mismo Pueblo; útilmente como guías dentro del Territorio, traen como consecuencia crímenes contra personas inocentes, debilita y pone en riesgo a nuestra organización y profanación de los lugares Sagrados, en nuestro territorio.
Han sido los Hermanos Menores (no indígenas), quienes han permitido y traído a nuestra Tierra una guerra que no nos pertenece y somos reiterativos en rechazar todos los hechos de violencia en nuestro Territorio. No somos culpables de las incomprensiones, los conflictos, las rivalidades, ni las formas adoptadas de resolver sus conflictos los hermanos menores en la guerra, que en este estado social de Derecho se respete nuestro derecho a la vida, a la tranquilidad, a la libre movilización dentro y fuera de nuestro Territorio, a la Cultura, a la Autonomía y a ser Gobernados por nuestras Autoridades.
Insistimos,
que la situación por la que hemos venido atravesando, la hemos dado a conocer en múltiples oportunidades, en diferentes escenarios, ante diferentes organismos estatales, a la vez que hemos solicitado asistencia y protección por parte del Estado. Así lo demuestra el contenido de numerosos documentos, oficios, actas, etc. de los cuales citamos a continuación algunos de los más recientes:
- En la Resolución Defensorial N° 24 de septiembre 18 de 2002, relativa a la situación de los derechos humanos de los pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta y de la Serranía del Perijá, se citan algunos documentos sobre quejas presentadas, se esboza la problemática de nuestros pueblos y se hacen algunas recomendaciones específicas;
En el Acta N° 004, de la reunión de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas, celebrada en la ciudad de Valledupar el 12 de diciembre de 2002, se sintetiza la presentación realizada por voceros de las comunidades indígenas sobre la situación actual de las mismas y se solicita al gobierno la protección de los derechos, vulnerados unos y amenazados otros;
- En la Circular N° 2064 de marzo 4 de 2003 del Ministerio de Defensa se esboza igualmente la situación de las comunidades indígenas y se establecen algunos requerimientos básicos para garantizar la protección de los derechos humanos;
- En el oficio dirigido por las autoridades de los pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta al Señor Presidente de la República, Doctor ÁLVARO URIBE VÉLEZ, con fecha 1 de abril de 2003, de manera sucinta se presenta la situación de orden público en los territorios indígenas, y se señala que no se han acatado las recomendaciones hechas por la Defensoría en la Resolución antes citada y se advierte que la violencia sigue cobrando vidas.
- En el Acta del Consejo de Seguridad Nacional para asuntos indígenas, presidida por la Ministra de la Defensa Nacional y los Altos mandos Militares de Colombia celebrado en la ciudad de Valledupar el 26 de septiembre de 2003, consta que están informados sobre la delicada situación de los derechos humanos de la población indígena y la presencia de grupos armados en el territorio, a la vez se urge al Estado para que se garantice la seguridad individual y colectiva de los pueblos indígenas de la Sierra Nevada.
-.El desarrollo de tres Consejos de seguridad departamental, con el señor gobernador y los Cuerpos de Seguridad del Departamento, y la participación de las autoridades indígenas.
- En la declaración del Pueblo Arhuaco sobre su situación general, realizada en Nabusímake en el marco de la reunión celebrada del 10 al 15 de octubre de 2003, con la presencia de representantes de diversos organismos Internacionales, estatales y no estatales, igualmente se expresó la preocupante situación de derechos humanos y el conflicto armado en el territorio, señalándose los hechos más recurrentes y de mayor gravedad en ese aspecto y se proponen mecanismos para llegar a una solución de los mismos.
Como bien se observa han sido muchas las ocasiones en las que el Pueblo Arhuaco se ha pronunciado FRENTE AL CONFLICTO , pero el Gobierno Nacional no ha garantizado siquiera el desarrollo y la implementación de los derechos establecidos, por eso solicitamos de manera urgente tomar cartas en el asunto con decisión y transparencia, de tal manera que seamos atendidos como lo establecen los derechos Indígenas en Colombia y los Derechos Internacionales Indígenas ratificados por Colombia; Porque el Gobierno y el Estado Colombiano son los responsable de la persistente tendencia a desaparecer como Pueblo Indígena.
Reafirmamos y rechazamos todos los actos delictivos de SECUESTROS en nuestras comunidades y en nuestro territorio de ciudadanos Colombianos y del Mundo; a la vez manifestamos, que los Pueblos Indígenas, y en nuestro caso el Pueblo Arhuaco, no necesitamos que se justifiquen actos delictivos de secuestros, como forma de visibilizar la “crisis humanitaria en la Sierra Nevada”; los problemas que han generado los actores armados en nuestro territorio no deben ser resueltos mediante llamados de atención de ellos mismos, en el caso del Ejercito de Liberación Nacional ELN, y exhortamos a la comisión de verificación a tener en cuenta a nuestras Autoridades Indígenas.
Desde hace más de tres años las organizaciones indígenas de la Sierra Nevada apoyadas por varias entidades Nacionales e Internacionales que trabajan el tema de Derechos Humanos, hemos venido esforzándonos por hacer visibles todos los abusos de los actores armados contra los indígenas y es muy preocupante que sea la presión de una acción armada, la que pretenda posibilitar un informe de carácter internacional sobre esta tragedia.
Directiva Central y Autoridades Tradicionales del Pueblo Arhuaco.