Paralelo a la reanudación de las negociaciones entre el gobierno, la empresa Urrá S.A. y los representantes de la etnia Emberá Katío del Alto Sinú, la Personería Distrital de Bogotá presentó un informe en el que revela las difíciles condiciones en las que se encuentran más de 400 indígenas, hacinados en la sede de la ONIC. De acuerdo con el organismo de control, de no adoptarse las medidas pertinentes, la localidad de la Candelaria estaría a punto de vivir una emergencia sanitaria.

 

Para la Personería Distrital, las precarias condiciones en las que se encuentran los Emberá Katíos pueden desencadenar una epidemia de tuberculosis, a pesar de los controles médicos que la Secretaría de Salud del Distrito viene realizando. A lo anterior se agrega la epidemia de varicela que desde hace dos meses se desató y que en la actualidad afecta a por lo menos cincuenta indígenas.

 

“Respecto a la atención en salud a la comunidad indígena, la Secretaría de Salud del Distrito ha emitido un concepto desfavorable de la situación sanitaria en la cual se encuentran los indígenas. Las condiciones de hacinamiento, presencia de humedad en la sede, dificultad para la disposición de excretas y basuras, aparición de una epidemia de varicela que ya ha afectado a alrededor de 50 integrantes de la comunidad – en su mayoría niños y niñas -, enfermedades respiratorias, enfermedad diarreica aguda, son algunos de los problemas”, puntualizó el informe de la Personería.   

 

El informe también señala como la situación es compleja en materia psicológica, pues el asentamiento en Bogotá “está destrozando a los indígenas”.

 

Por otro lado, la tensión tiende a aumentar con el anuncio de la movilización de cinco mil indígenas desde la región de Tierralta (Córdoba) a Bogotá.

 

En tal sentido, algunas de las recomendaciones emitidas por el organismos son:

 

  • Que el gobierno Distrital establezca una Misión Humanitaria que provea a los indígenas en materia de salud, alimentación, cobijas, colchonetas y alojamiento.
  • Que exista en materia de salud un acompañamiento a la administración Distrital por parte del Ministerio de la Protección Social.
  • Que el Departamento del Bienestar Social y el Instituto de Bienestar Familiar atiendan las circunstancias extremas de los menores de edad.
  • Permitir que la Personería actúe como mediador ante los gobiernos nacional y distrital para que la población indígena cuente con un albergue temporal adecuado. 

 

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