La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) y organizaciones defensoras de los derechos humanos envían Comisión de verificación y acompañamiento humanitario a la región de la Costa Pacífica Nariñense, donde las comunidades eperara siapidaara denunciaron que tres niños murieron y trece más se encuentran en graves condiciones de salud, como consecuencia de las fumigaciones de cultivos de uso ilícito.  Las mismas también afectaron a las aguas del Río Satínga que las abastece.

 

Las 91 familias, conformadas por 478 personas, pertenecientes a las comunidades de San José de Robles, Tórtola, Casa Grande, asentadas en el Resguardo Indígena del Río Satinga, se encuentran en una grave crisis humanitaria luego de que el pasado 25 y 26 de abril la Policía antinarcóticos realizara operaciones de fumigación de cultivos ilícitos.

 

La Asociación de Cabildos Indígenas Eperara Siapidaara de Nariño, ACIESNA, que representa a las comunidades indígenas de la Costa Pacífica de Nariño, de los Municipios de Olaya Herrera, El Charco, La Tola, Tumaco e Iscuandé, denunció la muerte por envenenamiento de los niños Evelio Chirimía, Yeison Chiripúa y la niña Maria Sandra Mesa Mejía, y el grave estado de salud de los niños: Einer Javier Isabe Quintero, Adriana Quintero Mejía, Carmen Deisy Mejía, Cristian David Mejía Caicedo, Kataerine Pertiaga Mejía , Juan Carlos Pertiaga, Felisa Mejía, Melisa Mejía, María Ángela Chiripúa, María Lucía Quintero, Luis Ernesto Quintero, Rafaelito Chiripúa, Gonzalo Chiripúa, quienes se encuentran hospitalizados en el Centro de salud de Bocas de Satinga en el Municipio de Olaya Herrera y en el Hospital de Tumaco, que además, no cuenta con los medicamentos necesarios para atender a los menores de edad.

  

“La vulnerabilidad en la que se encuentran las comunidades indígenas de San José de Robles, Tórtola y Casa Grande, especialmente los niños y niñas, por las consecuencias de la fumigación, que afectan su salud, haciendo que peligre su vida, como ya viene ocurriendo, pues se trata de comunidades que dependemos del río, de los cultivos de pancoger y en general del medio natural, se extiende a las comunidades de los Ríos Sanquianga, Tapaje, Sequihonda, La Tola e Iscuandé, donde habitan 15 comunidades Eperara Siapidaara en los Resguardos Indígenas de Río Satinga, La Floresta-Santa Rosa-San Francisco, Sanquianguita, Integrado del Charco, San Juan Pampón, lo cual agravaría la CRISIS HUMANITARIA que actualmente sufren las comunidades indígenas”, confirmó la ONIC.

 

 

 

 

 

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