En los últimos dÃas, los habitantes del resguardo indÃgena de Novirao, en el municipio de Totoró, Cauca, han recibido amenazas contra sus vidas porque han reclamado sus territorios sagrados. En sus predios se ubica la finca ‘Agropalacéâ€, de una asociación del mismo nombre que durante los últimos años ha explotado esta tierra con cultivos de espárragos. El pasado 8 de Septiembre el Movimiento de Autoridades IndÃgenas de Colombia, AICO, denunció estos hechos ante el Defensor del Pueblo, Wollman Pérez, a quien solicitó intervenir para garantizar sus derechos.
En la carta, también dirigida a la ProcuradurÃa General de la Nación, a la Oficina de Derechos Humanos de la presidencia de la República y al Delegado de la DefensorÃa para minorÃas étnicas y otras instituciones nacionales e internacionales de derechos humanos, AICO manifiesta su preocupación por vida del Gobernador del Cabildo, Faustino Cometa, y del comunero Wilmer Trujillo, quienes se vieron obligados a salir del resguardo para proteger su seguridad y la de toda la comunidad de Novirao.
Antecedentes
Según la comunidad, “Agropalacéâ€, es una finca de aproximadamente de 150 hectáreas que está ubicada dentro del resguardo y territorios ancestrales. AllÃ, la Asociación Agropalacé ha venido ocupando y explotando los terrenos sin ningún tipo de reconocimiento a la comunidad. Dicha asociación, desde el año 2000 ha tratado de vender estas tierras, sobre las cuales recaen tÃtulos de propiedad colectiva, inembargable, imprescriptible e inajenable, por ser tierras de resguardo.
Los indÃgenas señalan que “la última reunión (para arreglar este asunto) se efectuó en el mes de mayo del presente año en la ciudad de Popayán, donde asistieron altos funcionarios tanto a nivel del gobierno departamental como del Ministerio del Interior y del actual INCODER; allà quedó como compromiso la asignación de unos recursos para adelantar la negociación de la compra de tierras en el Cauca, donde está Finca Agropalacéâ€.
Frente a estas acciones no ha habido ninguna respuesta concreta por parte del gobierno nacional. En consecuencia, la Asociación Agropalacé ha estado adelantando negociaciones con particulares para vender la finca a unos nuevos “propietarios†que la utilizarán con fines urbanÃsticos. Ante estos últimos hechos, el Pueblo Totoró ha reaccionado y reclamado su derecho de tierras y territorio, y también han sobrevenido los hostigamientos y las amenazas.
La comunidad, a través de AICO, ha hecho un llamado de alerta sobre esta grave situación que tiende a empeorarse con el transcurso de los dÃas porque “se están conformando bandas para silenciar sus justos reclamosâ€. ¿Quiénes están detrás de estas amenazas?, es la pregunta que se hacen los habitantes de Novirao, mientras esperan la investigación que adelanten las autoridades competentes para esclarecer los hechos y garantizar el respeto de los derechos humanos de su pueblo.