En riesgo permanecen las comunidades indígenas de los resguardos de Tóez, Vitoncó, Tálaga y Huila, municipio de Páez, Cauca, a causa del ingreso masivo de grupos armados. Este jueves, dos personas perdieron la vida y cuatro más resultaron heridas a causa de la explosión de una granada dentro de un bus de servicio público por un guerrillero. Maltratos a la comunidad y varias detenciones también fueron denunciadas por las autoridades indígenas.

Una granada que explotó dentro de un bus de servicio público dejó como saldo la muerte del conductor y del guerrillero que la accionó. Cuatro pasajeros más resultaron heridos a causa de la explosión. Al parecer seis insurgentes abordaron el bus que transitaba entre la carretera que une a los municipios de Belalcázar y Silvia. Al encontrarse con un retén del ejército, uno de los subversivos, asustado, accionó la granada. El hecho se produjo el jueves 19 de enero de 2006, exactamente en Barronegro, resguardo de Vitoncó.

Este hecho se suma al ingreso de más de cuatro mil uniformados los cuales conducen armamento pesado y de largo alcance, que están ubicando en los cascos urbanos, con lo cual se coloca en riesgo a la población civil, según señaló el Consejo Regional Indígena del Cauca, CRIC.

Según las autoridades indígenas, el ejército ha maltratado comuneros y ha realizado varias detenciones, entre ellas, Julián Chaca, joven indígena del resguardo de Huila y Oscar Albeiro Salazar, trabajador de una retroexcavadora que adelanta labores en la zona. La autoridad tradicional exigió la libertad inmediata de estos civiles detenidos.

Ante tales hechos, las autoridades indígenas del departamento del Cauca solicitan al ejército respetar la población civil tal y como lo ordenan los tratados internacionales de Derecho Humanitario. También solicitan que no se restrinja el paso en la zona y se facilite y garantice su concentración en los sitios de asamblea permanente de Vitoncó, Tálaga, Huila, Caloto y Belalcázar, pues en casos de emergencia, las autoridades indígenas han decidido reunirse en las escuelas como sitios de asamblea permanente, aconsejando para esta eventualidad ir al caserío de Caloto.

En el comunicado emitido hoy por el CRIC, se hace énfasis en la necesidad de convocar “de forma urgente a los organismos e instituciones de Derechos Humanos del orden nacional e internacional para que estén alerta frente a estos acontecimientos que mantienen en riesgo de desaparición forzada a los pueblos indígenas de Colombia”.

Frente a la situación de riesgo que viven estas comunidades indígenas, se hizo también solicitud explícita a los soldados del ejército nacional para que eviten maltratar física y verbalmente a las comunidades y por el contrario garanticen la vida, integridad física y los derechos humanos de los comuneros indígenas y demás población de Tierradentro.

Escribir un comentario

Código de seguridad
Refescar