Redacción Actualidad Étnica
Bogotá. Febrero 16 de 2006
Por: Paola Andrea Zúñiga
La Asociación de Cabildos IndÃgenas del Norte del Cauca (ACIN), expresó su inconformidad el pasado miércoles 15 de febrero de 2006, enviándole una carta al presidente Ãlvaro Uribe; en ella se pronunciaron una vez más y de manera más contundente frente a las negociaciones del gobierno respecto al TLC. Esta proclama se dio después de conocerse el anuncio del viaje que realizará el presidente colombiano a Washington para participar en la negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.
Las autoridades indÃgenas del cauca, denuncian que el presidente no escucha las diferentes razones e incontables expresiones de la sociedad colombiana y de importantes analistas internacionales alertando sobre los peligros para la economÃa nacional. “A pesar de conocer su terquedad insistimos en no compartirlo por diferentes razones que hemos expuesto de forma pública a través de pronunciamientos y movilizaciones masivasâ€, expresaron las autoridades indÃgenas del Cauca en su carta.
El mensaje escrito por esta organización también muestra el desconcierto que tienen frente a las acciones del presidente Uribe en cuanto al manejo de la información con la opinión pública: “Tuvo usted la insolencia de decirle a la opinión pública que los indÃgenas le mentÃamos al paÃs respecto al TLC, desafiando con un debate nacional, si los indÃgenas cumplÃan la promesa de no alterar el orden público con la marcha a Cali. Cerca de 70 mil personas caminamos en paz y cumplimos nuestros compromisos, pero usted no señor presidente; nunca se realizó el debate pero usted si quiso mostrarle a la opinión pública que los pueblos indÃgenas acompañábamos las negociaciones, llevando con engaños a estar en el famoso “cuarto de al lado†indÃgenas de las zonas menos organizadas del paÃs. Situación que hicimos pública con nuestra negativa a participar del Consejo comunitario que usted citó en el mes de diciembre del 2005â€.
Consulta indÃgena y popular contra el TLC
Los diferentes enfrentamientos de opinión entre el gobierno y las comunidades indÃgenas han llevado a generar masivas movilizaciones por todo el paÃs: los congresos realizados en Cali, Bogotá y Córdoba, en Septiembre de 2004; Risaralda y Popayán en octubre del 2005. Asà como el XII Congreso Regional IndÃgena del Cauca realizado en marzo del 2005, el encuentro en Tolima en noviembre del 2005, y por último uno de los pronunciamientos más importantes de la comunidad: la Consulta IndÃgena Popular, se dio el dÃa 6 de marzo de 2005 y se llevó a cabo en Caldono, Inzá, Páez, ToribÃo, Silvia y Jambaló, municipios caucanos con alta población indÃgena y campesina.
La Consulta IndÃgena Popular arrojó que la mayorÃa de votantes se decidieron por el No al TLC. En los seis municipios votaron 51.330 personas; el No obtuvo 50.305 votos, mientras que el SÃ, 641. Esta votación superó las expectativas. Se habÃa calculado que máximo unas 40.000 personas votarÃan, teniendo en cuenta que en los seis municipios las elecciones de los actuales alcaldes municipales lograron 39.900 votos y que se contaba con una población electoral máxima registrada de 68.448 personas.
La ACIN, afirma en la carta enviada al mandatario que sus puntos de vista no han sido tomados en cuenta ni de forma seria, ya que constantemente el gobierno expone que su posición es fruto del desconocimiento o de influencias externas: “Nuestro rechazo a las declaraciones discriminatorias de los funcionarios del Estado colombiano, que se niegan a considerar los puntos de vista de los pueblos indÃgenas de forma serÃa y argumentan que son producto del desconocimiento o de la influencia de opositores del gobierno, siendo nuestra consideración que ello es otra forma de discriminación que limita la confrontación sana de las ideas, y viola ostensiblemente el principio democrático y de la igualdad real, fundamentos de la Nación colombianaâ€.
La comunidad indÃgena del Cauca, expone en resistencia a la idea de su desconocimiento con el tema, que antes de la Consulta IndÃgena Popular se realizaron talleres para niños, adolescentes y adultos, y que estas preparaciones se dieron haciendo un recorrido por las casas, las veredas y los resguardos de los municipios que participarÃan en la consulta, asà mismo explican que los comunicadores de estos pueblos se documentaron respecto al TLC y desarrollaron trabajos de difusión, orientación y discusión.
Los efectos del TLC
Los pueblos indÃgenas de todo el paÃs como los Arhuacos, Emberás, Huitotos, Guambianos, Pastos, entre otros, se han pronunciado durante el transcurso de estas negociaciones a través de sus lÃderes, y todos tienen puntos fundamentales en común:
1. El TLC repercutirá en muchas de las condiciones de vida de los indÃgenas, como la territorialidad de los pueblos, ya que se va negociar sobre recursos que atraviesan sus territorios.
2. El trabajo y la producción de las comunidades indÃgenas, afrocolombianas y campesinas serán condenados a desaparecer, y es una polÃtica de extermino, ya que los pueblos más débiles son los grupos étnicos y no están preparados para competir frente a la gran producción y poderÃo de los paÃses desarrollados.
3. Se agudizará la pobreza y la violencia con la presencia de megaproyectos económicos en sus territorios, esto intensificará la presencia de grupos armados, y generará un éxodo masivo de las diversas comunidades, como se ha dado antes en departamentos como Nariño y Chocó, donde la llegada del gubernamental cultivo de palma aceitera ha desplazado a cientos de familias indÃgenas y afrocolombianas.
4. A los Estados Unidos no le importa preservar la multiculturalidad de los paÃses con los que negocian, simplemente es un tratado para garantizar la colonización del capitalismo y su poderÃo en el mundo, favorecer a sus empresas dándoles el control de un territorio que se extiende en todo el mundo y asegurar un acceso libre sobre todo el continente, a sus productos, servicios, tecnologÃa y capitales, sin obstáculos ni dificultades.
Por su parte, el ministro de Agricultura, Andrés Felipe Arias, asegura que firmando que el Tratado de Libre Comercio no afecta la territorialidad de las comunidades indÃgenas, y que por el contrario a pueblos como el Cauca les va a favorecer la firma del mismo, ya que este sector depende de productos como la caña, los lácteos y las hortalizas. Lo anterior también está consignado en la Página de la Presidencia (www.presidencia.gov.co), cuando se afirma que “(…) se beneficiará la población más vulnerable porque, además de que gozará de las nuevas oportunidades que brinda una economÃa fortalecida, podrán financiarse más programas de carácter social que hagan realidad los derechos consagrados en la Constitución(…) En el TLC se regulan aspectos del comercio entre los paÃses pero no se entregan concesiones que pongan en peligro la soberanÃa ni mucho menos la identidad cultural del paÃs ni la de sus grupos indÃgenas, afrocolombianos, raizales y gitanosâ€.
Finalmente las razones de oposición a la firma del TLC por parte de las comunidades indÃgenas reviste una gran importancia ya que se están jugando aspectos fundamentales de supervivencia, no sólo de los pueblos indÃgenas sino a la comunidad en general en materia de recursos naturales, el espacio territorial, las condiciones de vida digna, la destrucción de la economÃa de los pueblos más débiles, cambios en los procesos sociales internos, la identidad cultural y el mantenimiento de la multiculturalidad.
En ese mismo sentido, se expresan las autoridades indÃgenas del Cauca en su misiva al presidente, cuando dice que “Los pueblos indÃgenas de Colombia, en la búsqueda de la armonÃa y el equilibrio, pensamos que los tratados justos deben responder a las necesidades de sus gentes promoviendo y posibilitando que los paÃses con economÃas débiles se fortalezcan y no que los poderosos aumenten su hegemonÃaâ€.