La FLIP registra con preocupación varias agresiones en contra de periodistas en los departamentos de Cauca y Huila, en desarrollo de las marchas indígenas en contra del Tratado de Libre Comercio -TLC- y otras exigencias de estas comunidades del sur del país.

En el Cauca


Al menos cuatro miembros de medios de comunicación del departamento del Cauca se encuentran ilegalmente retenidos desde ayer 17 de mayo, por las autoridades, en la estación de Policía de Piendamó, a 40 minutos de Popayán, capital de ese departamento, luego de los disturbios presentados en el resguardo de 'La María'.


El reportero Marcelo Forero, del periódico virtual 'El Turbión'; Jesús López y Carmen Eugenia León, de la oficina de comunicaciones del resguardo indígena de 'La María', quienes se encontraban haciendo el cubrimiento de las movilizaciones, fueron retenidos por miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios -ESMAD- con un grupo de 24 manifestantes.


Richard Calpa, director de la emisora 'La Libertad' del municipio de Totoró, también fue detenido por las autoridades mientras hacía el cubrimiento de los disturbios en su "radiocicleta" (unidad móvil de transmisión), equipo que fue incendiado y destruido por miembros del ESMAD, según lo manifestaron varios testigos consultados por la FLIP.


En declaraciones a la FLIP, Omar Vera, director del periódico 'El Turbión', manifestó que a su periodista le fueron confiscadas una cámara digital fotográfica y una grabadora digital de audio por las autoridades, antes de ser retenido. Vera agregó que a la comunidad de 'La María' también le confiscaron una cámara de video y material de apoyo.


El Defensor regional del Pueblo, Victor Javier Meléndez, quien se encontraba en el lugar de los hechos, manifestó que las autoridades irrumpieron en el lugar y que se presentaron disturbios entre los manifestantes y el ESMAD. El funcionario dijo que personas uniformadas están involucradas en saqueos a las bodegas del resguardo y con los saqueos a la oficina de comunicaciones de 'La María'.


Álvaro Mejia, asesor jurídico del Consejo Regional Indígena del Cauca -CRIC-, señaló que los equipos hurtados, al parecer por miembros del ESMAD, son un computador una cámara de video y los transmisores. Añadió que las manifestaciones fueron organizadas en contra de la firma del Tratado de Libre Comercio -TLC-, la reelección presidencial, las fumigaciones de cultivos ilícitos en el departamento y por el incumplimiento de varios pactos adquiridos sobre la tenencia y repartición de tierras, entre el actual gobierno y las comunidades indígenas.


Los disturbios


A las 3 de la tarde del pasado 17 de mayo, los indígenas que bloquearon la vía panamericana, esperaban la llegada del Ministro del Interior y de Justicia, Sabas Pretelt de la Vega, que al parecer negociaría con los líderes de la marcha, tras el desbloqueo de uno de los carriles de esta importante carretera, que conecta a Colombia con el Ecuador y al departamento del Valle con el sur del país.


Sin embrago, el Ministro no se hizo presente en el lugar y el Escuadrón Móvil Antidisturbios -ESMAD- ingresó al resguardo indígena e incineró varios vehículos y residencias del lugar, así lo afirmó Álvaro Mejia, asesor jurídico del Consejo Regional Indígena del Cauca.


El Coronel José de Jesús Celí Rincón, comandante de la Policía del Cauca, confirmó la retención de los encargados de la emisora del resguardo 'La María' (Jesús López y Carmen Eugenia León), quienes se encontraban transmitiendo en ese momento. Sin embargo, manifestó desconocer la retención de los otros dos periodistas.


Así mismo, manifestó que si miembros de la Policía estaban implicados en el robo de material periodístico en los disturbios, le solicita a la Fiscalía General de la Nación para que se investiguen estos hechos.


En Neiva


Por otro lado, en Neiva, capital del departamento del Huila, el equipo periodístico de 'TV novedades', que se transmite por varios canales de cable en el departamento, informó sobre las agresiones de las cuales fue víctima el pasado lunes 15 de mayo en las instalaciones de la Universidad Surcolombiana.


Los hechos se presentaron a las cinco de la tarde, después de que el equipo periodístico finalizó el cubrimiento de la toma de las instalaciones de este centro educativo, por parte de varias comunidades indígenas. Según lo manifestó a al FLIP José Ignacio Valencia, camarógrafo de 'TV novedades', varios encapuchados los amedrentaron con puñaletas para que entregaran los equipos, bajo el pretexto de que estaban grabado para la Policía.


Valencia les dijo que nos les entregaba los equipos, que miraran las imágenes que no comprometían a nadie. No obstante, los encapuchados, que al parecer no formaban parte de las manifestaciones indígenas, los agredieron hasta que Valencia les entregó el casete.


Frente a estos hechos, los líderes indígenas que en principio habían decidido quedarse en la universidad tomaron la decisión de salir de la ciudad para evitar inconvenientes con la Policía.

Según datos recogidos por la FLIP, los directivos del dentro educativo se comunicaron con los periodistas agredidos para conocer las circunstancias en las que se presentaron los hechos. La FLIP trató de comunicarse con el rector de la Universidad Surcolombiana,
Ricardo Mosquera Mesa, para conocer su posición frente a las agresiones en contra del equipo periodístico, pero esto no fue posible.


La FLIP rechaza la retención ilegal de los periodistas y miembros de medios de comunicación en el Cauca y exige su pronta liberación. Así mismo, solicita que se investigue a los miembros del ESMAD involucrados en el hurto de los equipos de transmisión de la oficina de comunicaciones del resguardo 'La María'. Igualmente, a que respondan por los daños causados a los medios de comunicación destruidos en los disturbios presentados en esta región del país.


Por otro lado, recuerda que la labor de los medios de comunicación en situaciones de desorden público es la de informar los hechos que puedan poner en riesgo a la sociedad.


La FLIP hace un llamado a las autoridades para que se respete la labor de los periodistas, camarógrafos y reporteros gráficos de los medios de comunicación, y recuerda que es un deber de las autoridades dar las garantías suficientes para el ejercicio de su labor. Cualquier obstrucción, agresión o retención ilegal a periodistas o miembros de medios de comunicación constituye una grave violación a la libertad de prensa.

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