Las comunidades indígenas lideradas por sus autoridades legítimas: cabildos, asociaciones zonales, organización regional CRIC alertan a todos los comuneros y a la opinión pública sobre la manipulación que desde diversos poderes e intereses se quiere hacer de la lucha ancestral de nuestros pueblos, lucha que se ha realizado siguiendo la sabiduría de nuestros mayores y que nos ha llevado por duros caminos, pero que han impedido que exterminen, nos colonicen, nos avasallen y nos nieguen nuestros derecho legítimo a seguir existiendo como pueblos, dueños de nuestros territorios, herederos de una rica cultura e identidad cultivada por siglos y de una fértil e inquebrantable dignidad cultivada por el ejemplo de nuestros mayores y de nuestros mártires.

 

Estamos empeñados en recuperar todo aquello que los poderosos nos han robado y no dejaremos que sus nuevas estrategias y métodos de explotación, invisibilidad y negación prosperen ya sean que vengan impuestas por los fusiles o por las leyes ilegitimas que se dictan desde los centros de  iniquidad y corrupción.

 

Seguiremos afirmando nuestra autonomía territorial, política, cultural, educativa y jurídica, por eso nos declaramos enemigos de la guerra, mas no de la lucha y la esperanza de que algún día vivamos en un país soberano, justo, fraterno, en paz donde se respete la diversidad  y la vida en todas sus formas y manifestaciones. Estamos listos para seguir sumando con otros sectores sociales en la tarea de construir un país del tamaño de nuestros más bellos, profundos, legítimos y esperanzadores sueños.

 

Por esto rechazamos y no aceptamos las acusaciones, las manipulaciones y las estrategias de funcionarios del gobierno departamental y nacional que quieren destruir nuestra fe inquebrantable en la vida, nuestro espíritu comunitario, nuestros métodos y estrategias legítimos y autónomos de lucha y resistencia. Rechazo a la política de guerra del presidente Uribe que gasta 17.5 millones de dólares diarios para defender los intereses de los banqueros, industriales y  políticos aliados de los grandes capitalistas transnacionales. No permitiremos que nos sigan dando tratamiento militar y policivo, criminalizando nuestro legítimo derecho a la protesta y a la oposición política. Seguiremos levantando la bandera de la paz y de la salida negociada al conflicto político, social y armado que vive nuestra patria. Esta guerra no es nuestra, no la aceptamos y no queremos seguir sufriéndola.

 

Igualmente, no aceptamos las manipulaciones y las estrategias de los grupos armados que quieren atentar contra nuestra autonomía, involucrándonos en sus estrategias y métodos que no compartimos y rechazamos. Esta guerra  no es nuestra, no la aceptamos y no queremos seguir sofriéndola. Los invitamos a que siguiendo el camino y sabiduría de nuestros mayores busquemos una ruta que nos lleve a una salida negociada al conflicto político, social y armado que desangra nuestro país.

 

Durante las próximas semanas, los gobernadores con sus comunidades llevarán a cabo asambleas donde analicemos, pensemos y busquemos salidas a los graves problemas, retos y amenazas que se ciernen sobre nuestras comunidades. Por lo tanto no conocemos decisiones en donde se plantee movilizaciones o procesos de liberación de la madre tierra a mediano plazo.  Las autoridades han diseñado una ruta en la que se ha convocado una comisión interinstitucional de verificación y verdad para denunciar y pedir castigo para los que cometieron los últimos atropellos contra las comunidades y se ha convocado a un conjunto de personalidades internacionales para que nos presten sus buenos oficios en una comisión de verificación y seguimiento a la situación de derechos humanos.

 

Nadie puede usurpar la autoridad legítima en la comunidad, cada uno de las autoridades, líderes y comuneros estaremos atentos a no dar marcha atrás en nuestro camino de autonomía, dignidad, resistencia y esperanza. Hoy mas que nunca es necesario reafirmar los principios que han guiado nuestra lucha, como pueblos: Unidad, tierra, cultura y autonomía, en el propósito de seguir caminando sobre las huella de nuestros mayores porque hoy nos corresponde dejar un sendero para que nuestros hijos puedan seguir caminando con libertad.

 

Popayán, 1 de Agosto de 2006                

 

CONSEJERIA MAYOR CRIC

Escribir un comentario

Código de seguridad
Refescar