Apartes de la entrevista publicada por www.vanguardialiberal.com
A la misión acudieron dos fotógrafos independientes, incluso un francés, dos estudiantes bogotanos y Mark James Maughan.
Maughan es inglés, lleva cinco meses y medio en Colombia y es periodista de actualidadetnica.com, el periódico virtual de la Fundación Hemera, que trabaja con los indÃgenas.
Preguntas y respuestas
VL ¿La misión logró sus objetivos?
Por lo general, sÃ. Nos propusimos hacer lo que el Estado no hizo: encontrar los cadáveres de las vÃctimas de la masacre de febrero. Encontramos nueve cuerpos, de los cuales tres eran de una masacre de octubre de 2008 que casi no recibió atención en la prensa nacional. AquÃ, deberÃa aclarar que la fiscalÃa ya habÃa encontrado tres.
VL ¿Fue un éxito, entonces?
Un éxito arrollador. Que una organización tan pequeña como Unipa fuera capaz de convocar a tantas personas, es un hecho notable y admirable y creo que la minga dio a conocer la situación un poco más. Aunque demoramos más tiempo de lo que esperábamos, conseguir que una cantidad tan grande de gente caminara cuatro dÃas, buscara durante tres y regresara en dos, es un logro colosal en términos práctico.
VL ¿Cómo se siente después de llegar de la selva?
En lo personal, muy cansado. Llevaba ocho dÃas caminando en condiciones muy difÃciles y con una dieta a la que no estoy acostumbrado. Fuera de eso, sigo en el proceso de comprender lo que acabo de hacer.
VL ¿Cómo estuvieron las condiciones durante la marcha?
Complicadas, la verdad. A pesar de lo que pueda pensar la gente, la mayorÃa de los indÃgenas vive en pueblos y ciudades y no conocen las condiciones de la selva. Los primeros dÃas nos tocó acostumbrarnos, la gente se enfermaba y sufrÃa calambres, yo padecà de diarrea. El paso fue muy lento hasta que llegamos al campamento. HabÃa gente muy joven pero también mujeres de hasta sesenta años, en fin mucha gente no tenÃa la condición fÃsica para tal caminata. Además, al principio hubo una falta grave de comida pero la Cruz Roja nos entregó bastante.
Una vez tuvimos que cruzar un rÃo ancho con cuatro tablas de madera amarradas con cuerda. Nos tocó en turnos de dos, y asà nos demoramos medio dÃa allÃ. Es para que vean que fue un esfuerzo gigantesco.
VL ¿Qué parte de la experiencia le causó la mayor impresión?
Hay tres cosas que se destacan. Primero, tener a los cadáveres a 20 cm. de la lente de mi cámara y ver la realidad de este, me niego a usar la palabra conflicto, más bien es un genocidio. Vi evidencia de lo que es capaz de hacer este grupo, supuestamente revolucionario, y lo vi como un grupo más fundamentalista que revolucionario.
Segundo fue el encuentro con el Ejército. Cuando nos reunimos el domingo antes de empezar, el Ministerio del Interior nos habÃa asegurado que toda presencia militar se retirarÃa de la zona mientras se realizaba la búsqueda, pero al cuarto dÃa nos encontramos con el Ejército. Si las Farc hubieran creÃdo que la minga era un operativo militar, peligraban nuestras vidas. Fue por creerlos colaboradores del Ejército que mataron a los Awá. Luego nos informaron que las Farc rodeaban nuestro campamento y nos interceptaban la radio y me di cuenta del peligro que corrÃamos.
La tercera cosa que tengo que mencionar es la guardia indÃgena. Estuve con ellos durante mucho tiempo y ni puedo comenzar a describir el honor que sentà tener el privilegio. Fueron un ejemplo de espÃritu de equipo, colaboración y bondad. Les tengo un temor reverencial. No van armados, sólo llevan un palo simbólico, pero su disciplina es increÃble. La guardia indÃgena se entrena para defender solamente; no ataca. Y yo me hubiera sentido protegido por ellos aunque las Farc empezaran a atacarnos, les tenÃa mucha fe.
VL ¿Cómo ve la situación actual para el pueblo Awá en la selva?
Me da miedo. El senador indÃgena que nos acompañaba lo clasificó de genocidio y es verdad. Es una limpieza étnica, una matanza sistemática de gente muy pobre que viven en condiciones muy humildes. Espero que la situación llame la atención de la prensa nacional. En la rueda de prensa del jueves (hoy) se pedirá un diálogo directo entre los indÃgenas y las Farc.