La fiebre amarilla, que entró a Colombia por Venezuela hace aproximadamente seis meses, ya cobró la primera víctima indígena de manera oficial. El caso se registró en la Sierra Nevada de Santa Marta, donde la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), informó que se trata de Gustavo Torres, indígena Arhuaco, quien al no recibir atención oportuna sucumbió a la mortal enfermedad.
Además, la organización nacional informó que fueron contagiados cuatro indígenas Arhuacos de una misma familia.
Según Helena Izquierdo, directiva de la IPS Indígena Dusakawi que opera en el departamento del Cesar, fueron renuentes a la vacunación: “fue precisamente por esto que hoy tenemos una víctima mortal de esta enfermedad que en la zona ya se convirtió en epidemia”.
Efectivamente, el Ministerio de Protección Social declaró la epidemia nacional tras confirmarse la muerte de una persona en la ciudad de Manizales, elevando la cifra a ocho víctimas.
Para el caso de las comunidades indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta, declarada como una de tres las zonas vulnerables, la situación se torna más grave, pues las autoridades vienen denunciando como los grupos armados ilegales que operan en el sector, impiden el ingreso de las misiones humanitarias para que adelanten jornadas de vacunación entre la población.
Sin embargo, Izquierdo aseguró que gracias al Plan de Contingencia, implementado por la Secretaría de Salud departamental y municipales en convenio con Dusakawi.
“Se ha vacunado a casi el 100% de la población indígena de la Sierra, hablamos de Arhuacos, Koguis, Wiwas y Kankuamos, además de haber vacunado también a población campesina. El Plan ha sido exitoso porque la población se ha concientizado del peligro que pueden correr si no se hacen aplicar la vacuna, y por eso han acudido masivamente”, puntualizó la funcionaria.
Por su parte, para el presidente de la ONIC, Luis Evelis Andrade, manifestó que: “una epidemia de este tipo puede generar diezmar aún más a pueblos que, como el Kankuamo, sufren por los embates de los grupos armados”.