A la llegada de los españoles el pueblo Barí dominaba un extenso territorio que comprendía toda la parte oriental y sur del Lago de Maracaibo. Hoy habitan en la hoya del Río Catatumbo, en las comunidades de Karica, Chaborika, Bakukborika, Chisdóora, municipios de El Carmen, Teorema, Tibu y La Gabarra, frontera con Venezuela, y su población no llega a las cuatro mil personas, pese a que la resistencia ha sido su constante.
Las primeras luchas los Barí seguramente se dieron contra otros grupos que buscaron someterlos, pero su exterminio deviene de su encuentro con el hombre “blanco”. Primero los conquistadores, luego las misiones religiosas, y desde comienzos del siglo XX la ola colonizadora liderada y promovida por las compañías petroleras (Colpet y la Gulf Oil Company).
Esta resistencia les ha permitido que no entren en la fatídica lista de las “culturas muertas”, pero a pesar de ella han sufrido grandes daños no sólo en su organización social y en su cultura, sino también en la conservación de su espacio vital con la pérdida de casi el 80% de su territorio.
Hoy, debido a los múltiples intereses económicos despertados por la bonanza petrolera y luego la coquera, territorio Barí es zona de conflicto. Su población, víctima de las acciones de la guerrilla, de los paramilitares, del ejército y de los narcotraficantes, que se disputan el control del territorio. Hoy, más que antes, los aquejan las dudas frente a un futuro incierto; por eso, un delegado de caciquez lanza a través del portal de etnias esta voz de alerta y solidaridad para seguir en su resistencia:
“nosotros como comundad motilon Bari, queremos que las deciciones nos respeten.
no queres que nos pase como lo hermanos uwas, como el petroleo.
en estos momentos ecopetrol nos esta consultando con las comunidades. disque no estan consultando. el pozo se llama alamos 1.
queremos saber y tener otras experiencias de otros grupos etnicos con estos recursos del petroleo y como ha tratado ecopetrol con esos grupos etnicos.
y como estan ellos ahora si estan bien con la naturaleza y bien en sus necesidades basicas y con sus territorios y si ha un tienen dominio en ellas.
agradesco un pronta respuesta..
en estos temas y experiencias.”
Si usted conoce sobre el tema, tiene documentos y experiencias que le sirvan a este pueblo para enfrentar sus retos y continuar su vida, por favor envíelos a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., que ellos esperan de todos los colombianos un gesto de solidaridad.
La tradición cuenta que Sabaseba cuando él llegó a la tierra se encontró con un lugar oscuro, sin estructura y totalmente caótico; su trabajo fue ordenarlo y moldearlo para que quedara en su situación actual. A él los Barí le deben los fenómenos naturales, el sol, la luna y las estrellas. Primero está la tierra, habitada por hombres y animales; debajo se hallan grandes extensiones de agua donde viven los Sitbayi, los Taibabioyi, los Nichu, los Shumbrabra, los Karina, los Tai; encima de la tierra se hallan, en orden ascendente, seis cielos distribuidos con los siguientes elementos: Saba, ubicado debajo de las nubes, es el lugar donde viven los Nodariduo y los Saragdobobari, seres que protegen la tierra de las tempestades producidas por Daviddu. A continuación está la zona de Kokda Sada o zona de los vientos fuertes. Allí se forman las tormentas, tempestades y lluvias. También es el lugar de encuentro de los muertos con sus familiares. Por encima de las nubes está Barun, el cielo, habitado por Saimadoyi, las estrellas y los Basunchimba. Más allá del cielo está el firmamento o Barun asch, poblado por los Zamuros, los truenos, los rayos, la luna y el arco iris. Encima del firmamento está el Sagbada bibaru, lugar donde habitan los seres que han sido convertidos en aves. Finalmente, está el cielo más alto, donde está el sol (Nandou) y Sabaseba con su familia. (http://www.etniasdecolombia.org/indigenas/bari.asp )