"Toda una vida contra la impunidad" es el nombre del acto en el que se rendirá un homenaje a 11 defensores de derechos humanos que han dedicado su vida a la defensa de los derechos humanos en Colombia, en el marco de la instalación de la III Asamblea.

Dentro de los homenajeados póstumos se encuentran Eduardo Umaña Mendoza, quien fuera asesinado el 18 de abril de 1998, cuando tres personas, un hombre y una mujer haciéndose pasar por periodistas entraron a su oficina tras encerrar a su secretaria en un cuarto. Ante la negativa de irse con sus victimarios, le dispararon. Bien lo había dicho días antes “si vienen por mi, yo no me voy a dejar llevar… voy a estar aquí, voy a resistir, no me voy a doblegar.

En su lucha resuelta y valerosa por la libertad de los prisioneros políticos y defender los derechos del pueblo, y en su denuncia permanente del régimen proimperialista colombiano, Eduardo Umaña persistió siempre en su papel que sabía importante en la lucha por un mundo diferente, libre de opresión y explotación, no abandonó al pueblo ni en los momentos más difíciles, perseveró en el papel que le demandaban sus convicciones por encima de las amenazas, los allanamientos, y los intereses mezquinos que se le atravesaban en el camino.

Así mismo se rendirá homenaje a Alirio de Jesús Pedraza, detenido arbitrariamente el 4 de julio de 1990 aproximadamente a las 10 de la noche, por un grupo de 8 hombres vestidos de civil y fuertemente armados, en momentos en que salía de la panadería San Pablo, en el Centro Comercial La Campiña, calle 145 con carrera 92, cerca a su residencia en el sector de Suba, al noroccidente de la ciudad de Bogotá.

Pedraza de 40 años de edad, era miembro del Comité de Solidaridad con los Presos Políticos desde hacía más de 8 años y en su calidad de abogado adelantaba varios procesos contra el Estado colombiano, en los que varios miembros de las Fuerzas Armadas aparecen como responsables de violaciones a los derechos humanos y, en particular, al derecho a la vida. Además, apoderaba a 42 sindicalistas detenidos y torturados por miembros del ejército nacional en el período comprendido entre el 1 y 7 de marzo de 1990.

Este homenaje a toda una vida contra la impunidad, también se le rendirá a una de las personas más queridas por todo el movimiento social colombiano, Eduardo Umaña Luna, padre de Eduardo Umaña Mendoza.

Umaña Luna cuenta hoy día con 72 años de edad, se ha destacado por sus innumerables análisis sobre las estructuras socio políticas colombianas, algunos temas jurídicos y su infatigable carrera como maestro.

Estudio derecho en la Universidad Externado de Colombia, al tiempo que trabajaba como locutor de noticias en la Radio Nacional, luego que se diera cuenta que la carrera de ingeniería que cursaba en la Universidad Nacional, no era lo suyo.

Otras de las personas homenajeadas es Virginia San Juan de Duplat, quien fuera la fundadora del Comité de Familiares de Presos Políticos en 1978, igualmente Alvaro Vásquez del Partido Comunista, y Elvia Durán fundadora de la seccional Medellín de la Fundación Comité de Solidaridad con los Presos políticos.

El Movimiento de Víctimas igualmente ha querido rescatar la labor de defensores de derechos humanos, que en medio de condiciones adversas, persisten en la lucha por la tierra, la dignidad en regiones apartadas de nuestro territorio. Tal es el caso de Felix Manco, quien a pesar de contar actualmente con 72 años, continúa siendo uno de los principales líderes en la Comunidad de Vida y Trabajo de la Balsita, en el departamento de Antioquia y a quien los jóvenes de dicha comunidad reconocen como “la base de nuestra memoria”

Así mismo se le rendirá homenaje a doña María Medina, quien vive hace 35 años en el municipio de Castillo, departamento del Meta y que fuera desplazada igualmente por acciones militares paramilitares en el 2002. Nacida en el Cauca es una líder innata de la Comunidad Civil de Vida y Paz.

Junto con ella se destacará la labor de Enrique Petro, que viene desde el Curvarado en el departamento del Choco, donde vive hace más de 39 años, a pesar que es nacido en Córdoba. Es de resaltar que actualmente en parte de su finca esta ubicada la Zona Humanitaria desde donde 40 familias aproximadamente del Curvarado, están defendiendo su territorio frente a la siembra extensiva de palma aceitera en la tierra del Concejo Comunitario Mayor del Curvarado.

Fabiola Lalinde es otra de las personas a quienes se ha tenido en cuenta para este acto. Ella, como madre de Luis Fernando Lalinde, cuyos restos mortales le fueron entregados 12 años después de ser desaparecido, gracias a su búsqueda constante.

Y con ella a se recuerda también a María Tila Uribe, madre de Mauricio Trujillo quien tenía como compañera a Omaira Montoya, la primera persona detenida desaparecida en Colombia en el año 1977. María Tila fue detenida entre los años 1978 y 1981, tiempo en el cual escribió un libro que titulo “Desde adentro”. Se destaca su labor por ser defensora de derechos humanos de la tercera edad.

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