Unos ochenta mil gitanos viven en la República Checa en "ghettos" aislados. Se trata de una tercera parte de todos los gitanos que habitan en este paÃs. Esto se desprende de un reciente estudio realizado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
Los resultados del estudio dejaron perplejos tanto a representantes del oficialismo, como a especialistas y funcionarios de instituciones sociales que se ocupan de la problemática de los ciudadanos de la etnia gitana.
Según el documento, en la República Checa existen más de 300 localidades habitadas por gitanos que viven al borde de la miseria. Los habitantes de esos barrios o "ghettos" no consiguen trabajo y sus hijos frecuentemente no asisten a la escuela. El mayor número de los "ghettos" gitanos se encuentra en el norte del paÃs, según informó Eva Holecková, encargada del proyecto dedicado a los gitanos en la República Checa.
Eva Holeckova (Foto: Jana Sustova)"En el norte del paÃs, en zonas industriales, hemos encontrado las mayores conglomeraciones habitadas por gitanos. Se trata mayormente de barrios que forman parte de alguna grande ciudad industrial pero funcionan como ghettos. A pesar de vivir aislados los gitanos, en las grandes ciudades hay instituciones sociales que se ocupan de ellos y les brindan ayuda, lo que no se puede decir, por ejemplo, de Bohemia o Moravia del Sur donde los gitanos viven a veces en condiciones conmovedoras".
Eva Holecková matizó que en esas zonas tradicionalmente agrarias, no se tiene experiencia con la asistencia social a los gitanos y falta allà la necesaria infraestructura.
El tema de los gitanos es complejo y desde hace decenios el oficialismo busca las formas más adecuadas de cómo integrar a los gitanos al resto de la sociedad. El paÃs se vio expuesto en repetidas ocasiones a crÃticas por parte de instituciones internacionales que le reprocharon las condiciones inhumanas en que viven algunos gitanos checos.
La mayorÃa de esos "ghettos", según revela el estudio, surgió en los diez últimos años, en relación con las privatizaciones, restituciones y otros cambios en la sociedad. Los sociólogos advierten que sin la ayuda del Estado los habitantes de esos "ghettos" no hallarán solución a su situación y se acostumbrarán a no trabajar y a vivir de los subsidios sociales. Además, semejantes grupo de habitantes son los que más peligran caer en la drogadicción, el alcoholismo y el crimen.
Por Ivana Vonderková