Los Koguis, Kakuamos, Wiwas y Arhuacos somos pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta y conservamos la visión ancestral de la creación del mundo, donde están los principios del comportamiento, los cuales aluden a la responsabilidad frente al mundo. Y para nosotros esa responsabilidad está en lo espiritual a través de los pagamentos, ceremonias, bautizo, desarrollo, matrimonio y mortuoria.
Los mamos de cada etnia, quienes son la autoridad espiritual, tienen la responsabilidad de dirigir los compromisos de su gente porque están facultados debido al conocimiento adquirido. Los trabajos que realizan ayudan a buscar un equilibrio entre el hombre y la naturaleza a nivel espiritual, sanando así, las deudas espirituales. Y la persona sin deuda espiritual alcanza un mejor equilibrio con la naturaleza. Por eso cada vez son más los hombres y mujeres, que no son indígenas, busquen a los mamos para solucionar sus problemas.
Una identidad por salvar
En muchas asambleas en Nabusimake se ha debatido el tema de la participación política en el mundo occidental. Frente a esto, los mamos han sido claros al afirmar que nuestra responsabilidad es otra.
En las distintas ceremonias desarrollamos actividades de purificación a todos los elementos de la naturaleza, a distintos grupos humanos para que haya bienestar, paz y buen desarrollo en las actividades. Sin embargo, a pesar de la claridad de los mamos sobre nuestra misión, muchos de ellos, de manera contradictoria, participan en la política nacional utilizando su imagen y la de los pueblos indígenas de la sierra nevada.
El mamo debe ser una persona educada desde niño, recibiendo el conocimientos ancestral a través de su vivencias, brindando este conocimiento como algo de propiedad colectiva, para seguir cumpliendo la misión del cuidado de la naturaleza.
Cuando el conocimiento y la planta sagrada "la coca" se utiliza de una manera comercial, rompe los principios reales y se prostituye esa gran responsabilidad frente al mundo.