Del hombre del Manguaré a la Red Digital – Parte 2
Por Luis Carlos Osorio R.
Cuando uno oye hablar de José Lectamo, el indígena nasa que dirige el programa de comunicaciones de la ONIC, de inmediato asociamos su nombre al importante proceso de producción de medios que desarrollan los indígenas del Cauca. Pero cuando uno habla con Él, rápidamente cambia de parecer.
Muy joven Lectamo viajó a Medellín para estudiar comunicación social en la Universidad de Antioquia. Desde un comienzo se vinculó al proceso de la Organización Indígena de Antioquia –OIA-, poniendo a disposición de la organización sus capacidades en el campo de la comunicación organizacional, donde el énfasis no era propiamente la producción de medios. Ese elemento marcó una diferencia de entrada con los programas de comunicación indígena del Cauca, donde se privilegia la elaboración de contenidos, aclara José. Esto no quiere decir que no se asumiera con entusiasmo la elaboración de piezas multimediales y contenidos para la web de la OIA, agrega.
También hizo parte del programa de educación indígena desarrollado por la universidad, liderado por el indígena Tule Abadio Green, pero pronto lo abandonó “por decisión propia, por diferencias de pensamiento con el coordinador.
Antes de hablar de comunicaciones, de red, de incidencia en el distrito, lanza apreciaciones contundentes: “La propuesta de los indígenas no debe ser solo para los indígenas. Tiene que ser una propuesta para el país, porque este país es diverso. Los indígenas no podemos seguir marchando solos, radicalizados en un solo discurso. Tenemos que presentarle al país una propuesta de respeto, de tolerancia, de diversidad.”
Los últimos acontecimientos han venido vendiendo la idea de un movimiento indígena radical. Pues “No comparto un discurso radical indigenista. Cuando uno es radicalista, termina excluyéndose. Este país no lo construyen los afros, los indígenas o los gitanos solos. Esto lo construimos todos. Cuando no reconozco al otro, no puedo pretender que me reconozcan a mí.”
Lectamo sabe que con las movilizaciones que han logrado llevar al corazón mismo de las grandes ciudades, los indígenas han construido procesos de aceptación y de reconocimiento, que les han abierto nuevos escenarios políticos y ese pequeño capital es el que aportan en la construcción de un nuevo país que debe ser ante todo incluyente.
Su experiencia de trabajo con los “indígenas urbanos” como algunos les llaman, lo inició en Medellín con el Cabildo Chibcariwak. “Fue una experiencia gratificante, pues sirve para afianzar la identidad. Hay que reconocer que hay población y cabildos en las ciudades y nadie le quita lo indígena a quienes estamos en las ciudades.” En eso ha sido fundamental la academia, pues ha incidido en que los jóvenes indígenas puedan mirarse de otra manera.
Chibcariwak fue tal vez la primera experiencia en Colombia de cabildo multiétnico; fungía como una suerte de Red de indígenas de la ciudad, y por allí pasaron los principales líderes indígenas que llegaban a Medellín. El cabildo se fue convirtiendo en “un referente político, con grandes avances en temas como la unidad y las políticas públicas para los pueblos indígenas de Antioquia”, enfatiza el comunicador indígena.
El reto de la ONIC fue grande dice Lectamo. Lo primero era asumir la comunicación como una herramienta movilizadora. Lo segundo, hacer un replanteamiento de fondo al programa de comunicaciones de la organización nacional. Trabajar con un equipo pequeño con la premisa de comunicar a las bases indígenas como su tarea principal. Antes, el reto de la ONIC era la visibilización de la problemática indígena y la promoción de la organización, lo que los ponía a comunicar para las agencias de prensa, para los grandes medios, la comunidad internacional y las ONGs.
No somos una Agencia de Prensa
El cambio es sencillo, dice: “La ONIC no es una agencia de prensa, no es un centro de producción de medios, es una organización de carácter social. Nuestra tarea es llegar hasta el último indígena, saber comunicarle como es que nos afecta una política, qué es la consulta previa, porqué es un derecho fundamental. Nuestro reto es empoderar al indígena de toda la problemática del movimiento. Desde que tengamos gente empoderada, vamos a tener gente que se movilice con conciencia”.
Lectamo reconoce que existen muchos proyectos de comunicaciones, que tratan la problemática étnica y en particular las problemática indígena, y lo hacen bien, como el periódico Actualidad Étnica. Comparte la opinión de que es más importante fortalecer y empoderar medios alternativos, que asumirlos como competencia. “Esto no quiere decir que no hagamos lo otro, pero nosotros somos fuente, no somos el medio”
Los indígenas en la construcción de la Red interétnica Distrital
Según cifras oficiales avaladas por IDPAC, en la capital habitan unos quince mil indígenas que representan unos 52 pueblos de los 102 existentes en Colombia, según datos de la Organización indígena nacional. Jairo Romaña, Gerente de Etnias de IDPAC, dice que estos indígenas están organizados en cinco cabildos registrados en el distrito y en 9 procesos más que no cuentan con registro, pero hacen parte de los procesos organizativos que acompaña la Gerencia.
Romaña reconoce que la información sobre los medios étnicos e indígenas en la capital es limitada. Ellos mismos como Gerencia no se sienten convocantes de este proceso. Solo actúan como articuladores de las dinámicas existentes. En una reciente convocatoria realizada a medios étnicos, solo llegaron cuatro, en su mayoría proyectos de iniciativa privada con una escasa articulación con los cabildos, con los pueblos o con las organizaciones afros, gitanas o raizales.
José Lectamo reconoce, para el caso indígena, que la participación de la ONIC es reciente y limitada. A pesar de que ocupan un espacio de la Mesa Distrital de Comunicación Comunitaria, su participación no ha sido constante. Pero reconoce que es un proyecto ambicioso, bueno y avala el interés expresado por el alcalde Petro, el director de Canal Capital Hollman Morris y los directivos del IDPAC. Seguramente “hay algunas deficiencias en el cómo, pero esos temas se irán ajustando”. Lo importante es que “este es una apuesta por la tolerancia, por construir en la diversidad”, agrega.
El capital más importante para los indígenas en este empeño por construir red, son los estudiantes indígenas de universidad. Esta nueva generación indígena ha sido determinante para garantizar el desarrollo de las mingas indígenas y en general, para potenciar la movilización en las ciudades.
Los indígenas se han apropiado de las redes sociales y las han asumido como uno de los principales mecanismo para convocarse. A través de las Redes Sociales han hecho foros, eventos sociales y ya aparecen algunos grupos con propuestas de cátedras y otra diversidad temática. Recientemente realizaron un conversatorio sobre Consulta Previa en la Universidad Externado, y el éxito del evento se debió en gran parte al uso que hicieron de la red digital.
La construcción de Red no significa agrupar medios
Las comunidades étnicas y en particular los indígenas no tienen muchos medios en la capital. ¿Será que la tarea es la construcción de medios para conformar una red? Lectamo reconoce que los indígenas tienen pocos medios de comunicación en la ciudad, pero paradójicamente existe una importante producción de piezas de comunicación que tratan el tema de los indígenas urbanos, ya sea videos o grupos en las redes sociales. De pronto esto no obedece a una dinámica organizada y permanente, pero ahí está, lo que nos hace repensar el concepto de participación y de red. La red social convierte a cada persona en un comunicador, en un periodista de su propio mensaje, en una fuente permanente de pensamiento e información. Esa es la fortaleza de la Red Social y el reto de los sectores sociales, incluidos los indígenas, es como apropiarla.
En la localidad de Kennedy hay un proyecto de emisora y página web y está el proyecto de canal indígena que impulsa don Fidel. Aclara que este proyecto “no obedece propiamente a nuestra propia concepción y lo vamos a discutir con él”. Lo ven como un trabajo muy solitario que no se corresponde en casi nada con el pensamiento indígena. Las organizaciones indígenas lo cuestionan: ¿Cómo es que en Bogotá existe un canal indígena que no conocen los proyectos de televisión de los indígenas de Mutatá en Antioquia, ni los wayuu, ni TV kankuama, ni el tejido de comunicaciones de la ACIN? “Distinto con Actualidad Étnica –nos dice con respeto-, que todos conocen, que todos consultamos y consideramos un trabajo serio”. De hecho, Actualidad Étnica es una Red de comunicaciones que concentra la opinión de indígenas y de personas muy ligadas al movimiento indígena y étnico del país y actúa en la Mesa de Comunicación Comunitaria en el Distrito.
Para la ONIC, en esta nueva fase de su trabajo, el trabajo en Red es una oportunidad para ligarse a los sectores sociales y alternativos. Hay dificultades, es cierto, dice Lectamo, refiriéndose al abandono del proceso de algunas organizaciones gitanas y de pronto indígenas. Sabemos que hay reflexiones sobre los recursos dispuestos para estos proyectos, pero no está bien sacrificar procesos de esta naturaleza por situaciones que siempre tienen espacios para la reflexión y el debate.
Lectamo no oculta el interés de su organización por liderar este proceso, no porque tenga recursos. “Así no los tuviera, el trabajo en red y la construcción de la Red étnica nos permite relacionarnos con los otros sectores, difundir nuestras propuestas, dar a conocer nuestra propuesta de paz”. Tener espacios de difusión masiva para decirle a la ciudad, al país y al mundo que “los indígenas no somos de museo, ni somos los mas pobrecitos…que tenemos propuestas y que queremos ganarnos el reconocimiento del país. Que hemos cambiado, que hay una nueva generación de indígenas, mas formada, ligada a los procesos organizativos”.
Finaliza diciendo: “Nosotros tenemos una plataforma, una emisora, ese es nuestro aporte para construir Red, la ponemos al servicio de ustedes –refiriéndose a este medio- y al servicio de toda la RED”.
___________________
Algo Más: Este artículo hace parte de los productos realizados en el marco del convenio 838 suscrito entre IDPAC y la Fundación Nexos Municipales (2013), cuyo propósito es el fortalecimiento de los medios de Comunicación Independiente, Comunitarios y Alternativos en el Distrito, la Consolidación de Redes Locales y Poblacionales y el desarrollo de redes sociales en la perspectiva de construcción de tejido social en la capital.