Para evitar una grave confrontación entre los pueblos indígenas del Ecuador, a raíz de “comentarios mal intencionados por parte del Gobierno y varios dirigentes disidentes”, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador CONAIE y la Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador ECUARUNARI, solicitaron con urgencia la intervención de distintas organizaciones sociales y de la iglesia para que medien en el conflicto.
“Responsabilizamos al Gobierno Neoliberal de Gutiérrez por las consecuencias que puede provocar la intención de enfrentar entre los sectores indígenas, manipulando mediante decreto ejecutivo la representación, administración y gobierno autónomo de las instituciones públicas de desarrollo de las Nacionalidades y Pueblos”, dijo Humberto Cholango, Presidente del Consejo de Gobierno, Ecuarunari.
De igual forma, agregó que: “La lucha incansable de nuestros pueblos milenarios no doblegara el chantaje divisionista y oportunista de Gutiérrez, la reacción de nuestras bases se ha hecho sentir, ayer unas 800 personas de varios Pueblos y Nacionalidades, en especial de Kisapincha (Tungurahua), se hicieron presentes en el local de CODENPE, para decir aquí estamos para defender nuestros Derechos, que nos ha costado sangre y lucha, y vamos a estar en vigilia permanente. Además, la Asamblea/Taller del ECUARUNARI a realizarse los días 15 y 16 de julio en la sede de ECUARUNARI, en Quito, conjuntamente con sus bases tomará importantes resoluciones sobre este caso”.
Ante esto, las organizaciones indígenas apelaron a los Organismos Internacionales a mediar e intervenir en este conflicto en el cual involucran al presidente Lucio Gutiérrez, la Federación Ecuatoriana de Indígenas Evangélicos (FEINE), la Federación de Organizaciones Indígenas, campesinas y negras, (FENOCIN) “y otras organizaciones fantasmas vinculadas al régimen, que violentando la Constitución y el Convenio 169 de la OIT suscrito y ratificado por el Estado Ecuatoriano, con la supuesta reestructuración de CODENPE, lo que pretenden es imponer una dirección gremial, ya superada por los derechos de cuarta generación, de las instituciones que contradice a los Derechos Colectivos”.
Finalmente, el movimiento indígena ecuatoriano le dijo al Gobierno nacional y a las mencionadas federaciones que la lucha de miles de años de padres y abuelos indígenas: “no se puede borrar de un plumazo, porque la sabiduría milenaria está enraizada en nuestros pueblos, la unidad y fortaleza de los Pueblos, estará por encima de todo”.
