En la semana más convulsionada de los últimos años en Ecuador, por la dimisión del Presidente Lucio Gutiérrez, pueblos indígenas de diferentes provincias llegan a Quito con fin de presionar la salida del Congreso Nacional y la convocatoria de unas nuevas elecciones.

 

Así lo confirmó Benjamín Inuca, presidente de la Federación de Pueblos Kichwa de la Sierra Norte (FICI) que aglutina a más de 160 comunidades de esa región.

 

Por su parte, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) a la cabeza de Lucas Macas, condenó la clausura de la Radio la Luna de Quito “que ha despertado la conciencia popular de los ecuatorianos”, en medio de la crisis política, económica y social por la que atraviesa el hermano país.

 

El Ecuador se encuentra ahora en manos del que hasta el miércoles era vicepresidente del país, Alfredo Palacios, quien asumiera la presidencia luego que una mayoría opositora en el parlamento destituyera del cargo a Lucio Gutiérrez. La decisión fue tomada con 60 votos de los 62 legisladores presentes.

 

Sin embargo, los indígenas aseguran que no quieren repetir lo que consideran: “el error que se produjo tras las caídas de Abdalá Bucarán y de Jamil Mahuad”. Precisamente, por eso estarán vigilantes en Quito, para presionar por nuevas elecciones, “lo más pronto posible”. Incluso, se mostraron contrarios a que Alfredo Palacio esté en el poder.

 

Así mismo, Luis Macas, reiteró que el pueblo de Quito “no está solo y junto a todos los pueblos del Ecuador seguimos en una movilización progresiva para QUE SE VAYAN TODOS. No vamos a tolerar la violencia fascista en contra la libre expresión y el ejercicio de la soberanía popular (...) De igual forma, deben largarse todos los cómplices del gobierno que quieren acabar con la única y legítima organización de las Nacionalidades y Pueblos”.

 

A la celebración por la destitución de Gutiérrez se sumaron organizaciones sociales e indígenas de Bolivia, las cuales saludaron el papel protagonizado "por el heroico pueblo de Quito" que derivó en la caída del presidente de Ecuador, "un servil del imperialismo".

 

"Desde ese punto de vista ya estaba marcada su caída, porque era servil de las transnacionales y del imperialismo, por eso lo han tenido, pero últimamente, como ya no les sirve a los capitalistas, lo han abandonado", dijo Felipe Quispe, jerarca de los indios aymaras del oeste andino boliviano, quien pidió a los ecuatorianos mantener reservas con el sucesor de Gutiérrez, el vicepresidente Alfredo Palacio. "El vicepresidente es la misma chola (mujer) con la pollera cambiada, de tal forma que no hay una esperanza buena para nuestros hermanos de Ecuador", apuntó.

 

El nuevo presidente de Ecuador, Alfredo Palacio, deberá completar el período constitucional del depuesto jefe de Estado, que finaliza en enero de 2007. El mandatario enfrenta el enorme desafío de estabilizar el país en un clima de agitación popular y descreimiento generalizado hacia la dirigencia política, para lo cual las mejores herramientas serán el respeto por las instituciones y la independencia de los poderes del Estado.

 

 

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