Del 3 al 7 de febrero se desarrolló la Asamblea Continental GuaranÃ. El municipio San Gabriel do Sul, de Brasil, albergó a más de mil personas provenientes de los pueblos guaranà del mismo Brasil, Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay. El eje central de la Asamblea fue la conmemoración de los 250 años de la muerte del lÃder Sepé Tiataju, quien luchó de manera decidida contra los ejércitos de España y Portugal. Asà mismo se discutieron los temas de la posesión y expropiación de tierras que en todos estos paÃses enfrenta el pueblo guaranÃ.
Para dar inicio a la Asamblea Continental Guaranà más de cinco mil personas se congregaron en el Parque Tradicionalista de la sede del evento para conmemorar el aniversario de la muerte del lÃder indÃgena Sepé Tiataju. Y una vez más los pueblos indÃgenas, representados en esta ocasión por el pueblo guaranÃ, dieron muestra de organización y civismo. La multitud fue dividida en cuatro campamentos: el IndÃgena, el de la juventud, el campesino y el de las Quilombolas, que permitieron un desarrollo óptimo de la actividad.
Es importante resaltar que el campamento de los jóvenes fue el primero en iniciar sus actividades. Setecientos de ellos asistieron a una charla sobre la historia de los Siete Pueblos de las Misiones y del lÃder centro del evento. Durante esta charla se revivió la historia en la que el valeroso indÃgena fue muerto después de recibir en su cuerpo la lanza de un portugués y el disparo de un español. Y se recordó además, que después del deceso de Sepé Tiataju, bajo la comandancia de Nenguiru, mil quinientos indÃgenas fueron masacrados por portugueses y españoles.
Abandonando el campo conmemorativo, a partir del 5 de febrero, los misioneros e indÃgenas presentes en la Asamblea Continental GuaranÃ, se dedicaron a discutir y analizar los temas comunes a los indÃgenas guaranÃes de Argentina, Brasil y Uruguay.
El tema de tierras, definitivamente fue uno de los que más interés suscitó en los asistentes, pues la estructura agraria de los paÃses analizados está fundamentada en monocultivos para la exportación, y el principio de la propiedad privada, como forma de división de la tierra, es opuesto a la visión del mundo del pueblo GuaranÃ, que confirma la creación de la tierra para el uso colectivo. En Argentina, por ejemplo, la mayorÃa de las tierras pertenecen a las grandes empresas.
Sin embargo el problema por el territorio no es nuevo para los pueblos indÃgenas, quienes históricamente se han visto obligados a desplazarse de sus tierras por la incursión de grupos sociales y económicos con el interés de lucro que suscitan terrenos tan productivos, como los que tradicionalmente han ocupado los indÃgenas.
Como consecuencia del desplazamiento indÃgena, los cambios culturales fueron otro de los temas de interés durante la Asamblea, porque en la concepción guaranÃ, todos los seres que nacen de la tierra son vivos, y si el territorio es devastado por la incursión de la industria, su población originaria pierde el sentido para la vida en este ambiente determinado.
Como una solución al problema que enfrentan los guaranà por su territorio, los gobiernos nacionales implementaron la creación de unidades de conservación en los lugares tradicionales de esta pueblo indÃgena, sin embargo, este mecanismo ha traÃdo consecuencias nada favorables para él, porque a sus mismos miembros les es vedada la incursión en ellos.
Otro de los temas desarrollados duran la Asamblea Continental Guaranà fue el de los obstáculos que los indÃgenas de este pueblo tienen para desplazarse de un sitio a otro. Dentro de su concepción del mundo no existen fronteras en sus territorios, y es totalmente necesario para su desarrollo cultural el desplazarse constantemente de un lugar a otro. "El mundo occidental no ha podido entender que aun viviendo en el mismo paÃs, los guaranà ven el mundo de manera diferente", precisó en una de sus intervenciones Mario Oliveira, del Consejo Indigenista Misionero, CIMI.
A la conclusión que se llegó durante este evento en Brasil, fue que cuando se logre la devolución del territorio guaranà a este pueblo originario, el paso a seguir, definitivamente es la recuperación ambiental de la tierra, que a base de monocultivos, uso para el ganado e industrialización ha perdido sus caracterÃsticas originales, que la hacen una reserva natural sin igual en el mundo.