Dos puntos importantes están inscritos en la agenda de esta cumbre, precisamente la movilización de los países africanos de cara a la crisis económica mundial y la integración de NEPAD en las estructuras y en el proceso de la Unión Africana.
Los preparativos de la reunión del G-8 que transcurrirá los próximos 9 y 10 de julio en Roma serán abordados durante esta sesión y los resultados de las consultas con la presidencia italiana de la Cumbre del G-8 serán dados a conocer a los participantes en la cumbre.
El tema de la reunión de este año, que transcurre del 1 al 3 de julio, es "Inversiones en el Sector Agrícola para el Crecimiento Económico y Seguridad Alimentaria", confirmaron fuentes de la organización.
El Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola, (IFAD), anunció a comienzos de junio que la recuperación económica en el continente debe basarse en la creación de un sector agrícola dinámico. La agricultura a pequeña escala suministra cerca del 80% de los alimentos consumidos en África.
Además, cerca del 40% de la mano de obra africana trabaja en el sector agrícola, que es responsable del 30% de los ingresos de exportación del continente.
En su discurso ante una reunión de ministros africanos de finanzas los pasados días 6 y 7 de junio, en El Cairo, el presidente del organismo, Kanayo Nwanze, pidió a los gobiernos africanos para no repitan los errores del pasado año, implementando programas de subsidios y control de precios.
La cumbre de Sirte abordará el impacto de la actual recesión global en África. Los líderes africanos van a debatir también la actual crisis en Darfur y Madagascar, entre otros asuntos.
La unión Africana fue creada en 2002 para sustituir a la Organización de Unidad Africana (OUA). Su principal objetivo es la promoción de la integración socio-económica del continente y una mayor unidad entre los países africanos.