Una destacada firma de lobby de Washington reconoció haber enviado cartas falsificadas a un legislador de Virginia exhortándolo a votar en contra del proyecto de cambio climático de la Cámara de Representantes.
La firma lobbista Bonner & Associates envió cartas a la oficina del congresista demócrata Tom Perriello, de Virginia, que simulaba ser enviada por miembros de la Asociación Nacional para el Progreso de la Gente de Color (NAACP, por su sigla en inglés) y de la organización latina "Creciendo Juntos".
En las cartas se exhortaba a Perriello a votar en contra del proyecto de cambio climático con el fin de proteger a las minorías de facturas de energía más altas.
Las cartas falsas se redactaron en papel membretado de la NAACP y "Creciendo Juntos" y estaban firmadas por personas inventadas. La compañía lobbista afirmó que las cartas fueron enviadas por error por un empleado temporario, pero la firma tiene ya antecedentes de lo que se denomina "práctica de astroturfing" (que se traduciría como "césped sintético o artificial"), es decir, tergiversar políticas respaldadas por empresas y presentarlas como posicionamientos reales de las bases.
La compañía se negó a revelar quién estaba pagando por la campaña para desbaratar el proyecto de ley de cambio climático. Entre los clientes de Bonner y Associates hay empresas como Citicorp, Aetna, PhRMA, Dow Cheimcal, AT&T y General Motors. El esfuerzo de la empresa lobbista terminó fracasando, ya que el congresista Tom Perriello votó en favor del proyecto de ley.