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Con un virtual éxito culminó el domingo último la Primera Cumbre de los Pueblos Indígenas del Perú realizada en la ciudad de Huancavelica del 03 al 05 de diciembre con la participación de aproximadamente 700 delegados indígenas procedentes de todas las regiones del país.

 La Cumbre Indígena fue resultado de un proceso inicial de articulación y confluencia indígena promovido por la Coordinadora Permanente de los Pueblos Indígenas del Perú – COPPIP y tuvo como actividad preparatoria cuatro Asambleas Taller Macro Regionales que se realizaron en las localidades de Contamana (Macro Region Oriente), Satipo (Macro Región Centro), Moquegua (Macro Región Sur) y Ayavaca (Macro Región Norte).

La Cumbre Indígena trabajó un temario de cinco puntos: a) Territorio, Recursos Naturales, Agua y TLC; b) Identidad, Cultura y Educación; c) Desarrollo, Economía Solidaria y TLC; d) Derechos, Autonomía y Autodeterminación; y e) Política Nacional e Internacional; y suscribió finalmente la denominada Declaración de Huancavelica.

El rechazo y condena a la suscripción de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos fue uno de los temas presentes en los diversos paneles y grupos de trabajo por su evidente afectación a los derechos colectivos de los pueblos indígenas y comunidades del Perú y que poseen ingentes recursos naturales en sus territorios de dominio ancestral.

La Cumbre contó con la activa participación de los pueblos amazónicos por medio de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP) que movilizó una nutrida delegación representativa. 

Por la región costa-andina hubo una mayor presencia de delegados convocados por la Confederación Nacional de Comunidades Afectadas por la Minería (CONACAMI). Por su parte, la Federación Departamental de Comunidades Campesinas de Huancavelica (FEDECH) y la Federación de Mujeres Campesinas del Distrito de Yauli (FEMUCAY) jugaron un rol activo como organizadores locales.

La Confederación Campesina del Perú (CCP) y la Confederación Nacional Agraria (CNA) no participaron del evento y la primera expresó alguna discrepancia con la convocatoria. Asimismo, se observó la ausencia de  delegados de organizaciones con trayectoria en el movimiento indígena como la Asociación de Defensa y Desarrollo de las Comunidades Andinas del Perú (ADECAP) y el Centro de Culturas Indígenas Chirapaq, miembros de la COPPIP.

El evento tuvo el realce de la participación de destacados líderes indígenas de países hermanos como Sebastiao Manchineri, Coordinador General de la COICA, Luis Maldonado (Ex Ministro de Estado - Ecuador), Lucio Colque (CONAMAQ- Bolivia) y el senador Francisco Rojas Birry, del pueblo Emberá de Colombia.

A pesar de la actitud negativa hacia el evento de Eduardo Candiotti, un conocido disociador en el movimiento indígena, predominó en los participantes un espíritu de apertura y unidad que deberá cimentarse en la Segunda Cumbre Indígena Nacional, a realizarse el próximo año en una localidad amazónica.

A pesar de los resultados positivos del evento fueron evidentes algunas fallas motivadas por la improvisación y organización apresurada. Por ejemplo, se cambió dos veces de auditorio, las carpetas y materiales se distribuyeron el segundo día y el programa sufrió retraso pues el primer día se perdió valioso tiempo. Esta situación pudo ser peor de no haberse contado con el apoyo de la asociación Servicio Integral de Cooperación Rural Anccara - SICRA la cual brindó un apoyo importante.

Según algunos líderes entrevistados, la metodología de trabajo de la Cumbre no optimizó el aporte de los eventos macroregionales previos y a pesar del buen rendimiento de los grupos de trabajo el borrador de la Declaración fue observado por delegados de diversas regiones por tener mucha palabrería, no incluir problemas concretos de los pueblos y no proponer una agenda política.

Sin duda, la Cumbre Indígena de Huancavelica fue un evento muy importante y aleccionador, un paso más hacia la unidad de los pueblos, comunidades y organizaciones indígenas del Perú. 

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