Opinión

 

Las últimas acciones desarrolladas por la Dirección Antinarcóticos comprometen los territorios indígenas, en especial los que están ubicados en el departamento del Guaviare, donde se está proyectando iniciar procesos de erradicación de cultivos de coca mediante la aspersión aérea.

 

La Organización de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana, OPIAC, como representante legal de los 56 pueblos indígenas que habitan la Amazonía Colombiana, siempre ha mantenido la disposición al diálogo y la concertación con el gobierno Nacional, sin embargo recibimos con preocupación el incumplimiento de los acuerdos logrados en los diferentes espacios de interlocución.

 

¿Es que acaso los funcionarios desconocen las directrices del gobierno y el estado colombiano?, si eso es cierto entonces es necesario crear un espacio de difusión de los acuerdos existentes al interior del gobierno nacional.

 

Muy a pesar de que los pueblos indígenas de Colombia y en especial los de la Amazonía Colombiana, creen que la mejor manera de contribuir con la paz es respetando los acuerdos y manteniendo el diálogo permanente entre las partes, esto no se ha logrado en forma eficaz y eficiente por parte del estado.

 

Es por eso que en el tema de la sustitución de los cultivos ilícitos, una vez establecidos algunos acuerdos que permita salvaguardar la integridad física de nuestros territorios amazónicos y por ende sus habitantes, aun no se haya avanzado significativamente en su aplicación.

 

En este sentido y amparado por la sentencia SU-383, emitida por la Corte Constitucional donde el día 13 de mayo de 2003, se tutela los derechos de los pueblos amazónicos a la diversidad étnica y cultural, a la participación y al libre derecho de la personalidad, (según comunicado de prensa). La Corte encontró pertinente disponer del procedimiento de consulta previsto en la Ley 21 de 2001, aprobatoria del convenio 169 de la OIT.

 

En consecuencia las decisiones relativas a la erradicación de cultivos ilícitos deben considerar métodos que garanticen de manera efectiva los derechos humanos, los valores culturales, económicos y sociales de los pueblos indígenas y tribales, para asegurar el reconocimiento de la diversidad étnica y cultural de la nación colombiana, sin desmedro de las potestades inherentes al Estado Colombiano para definir y aplicar de manera autónoma la política criminal y dentro de ella planes y programas de erradicación de los cultivos ilícitos.

 

Por otro lado las autoridades y organizaciones de los pueblos indígenas de la Amazonía colombiana y el Gobierno Nacional en cumplimiento del mandato de la Sentencia SU-383 de 2003 de la Honorable Corte Constitucional, suscribieron el 14 de noviembre de 2003 acta de protocolización de la Consulta con los siguientes acuerdos:

 

- La erradicación de cultivos ilícitos en los territorios indígenas de la Amazonía Colombiana se realizará de manera manual, concertada y verificable, entre las autoridades y organizaciones indígenas y las entidades competentes.

 

- La concertación deberá determinar los tiempos, mecanismos de verificación y apoyo para la ejecución de programas de desarrollo alternativo acordes con las características culturales y ambientales de los pueblos y territorios indígenas.

 

En relación con los demás derechos tutelados se acuerda lo siguiente:

 

- El Gobierno Nacional conformará una “Mesa Regional Amazónica” con representantes de las organizaciones y autoridades indígenas de la Amazonía, y de las demás entidades del orden nacional, regional y local, (…)

 

- En concertación con las autoridades y organizaciones indígenas de la Amazonía Colombiana, el Gobierno Nacional se compromete a formular e impulsar la aprobación de un documento de política –CONPES– el cual contendrá aspectos económicos, culturales, políticos, ambientales y de inversión en los resguardos y comunidades indígenas de esta región (…)

 

Teniendo en cuenta estos antecedentes y con base a las últimas acciones desarrolladas por la Dirección Antinarcóticos y que comprometen los territorios indígenas, en especial los que están ubicados en el departamento del Guaviare, donde se está proyectando iniciar procesos de erradicación de cultivos de coca mediante la aspersión aérea, se está desconociendo uno de los acuerdos logrados en cumplimiento de la sentencia SU-383, donde se hace referencia a los mecanismos y procedimientos en el proceso de erradicación de cultivos ilícitos.

 

Como es de conocimiento general, la consulta previa no se remite a una reunión o un taller, como el que se desarrolló el día 31 de julio de 2006, en la ciudad de Puerto Inírida (Guainía), donde la Dirección Antinarcóticos invita a la OPIAC, con un día hábil antes del evento, lo cual no garantiza una Consulta real y objetiva, ni la participación plena de las autoridades y organizaciones indígenas, pues actividades como el de las fumigaciones afectan no solo el medioambiente, si no la salud de sus habitantes.

 

En este sentido la posición de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana, es el de buscar los mecanismos necesarios que permitan la erradicación de cultivos ilícitos de acuerdo a los mecanismos y procedimientos establecidos en los acuerdos con el estado colombiano.

 

“Los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana, continúan con el propósito de buscar la armonía entre la selva y el hombre por el respeto por la vida”

 

Comité Ejecutivo OPIAC

 

Bogotá. 15/08/2006. El resguardo indígena Triunfo Cristal Páez y cabildo San Juan Páez - Florencia, Valle del Cauca - denuncian ante la comunidad nacional e internacional, el asesinato de dos indígenas de su comunidad y el riesgo de la población por los constantes enfrentamientos entre la fuerza pública y la guerrilla de las FARC.

 

El 4 de agosto en un vehículo de transporte público, Rosa Tulia Poscue Ortiz,  fue obligada por hombres no identificados a retirarse con ellos y apareció horas más tarde asesinada, con lesiones de arma blanca en todo el cuerpo.  Así mismo, dos días después, cuando manejaba  su auto personal, fue detenido, José Olmedo Pillimue; quien fue asesinado con tres disparos en la cabeza.

 

Estas personas pertenecían al pueblo de los indígenas Nasa, eran del resguardo, sin lazos con los actores del conflicto, dijo a Actualidad Étnica, el gobernador del cabildo San Juan Páez, Horacio Daeua. Los hechos fueron denunciados ante los organismos de la comunidad nacional e internacional,  además son injustificados los daños causados a dichas familias y argumenta, que como pueblo indígena, neutral y libre de interés dentro del conflicto armado, no entienden por qué son las víctimas principales de una guerra que no tiene razón de ser.

 

La situación de orden público es crítica, el acceso al lugar de asentamiento de los resguardos es difícil por su ubicación geográfica y de igual forma, operan las FARC y delincuencia común, aunque el lugar es custodiado por el Batallón Agustín Codazi de la Tercera Brigada del Ejercito Nacional, la situación es grave, afirmó el gobernador.

 

A través del comunicado, 9 de agosto de 2006, el resguardo Triunfo Cristal Páez, rechaza la violencia en contra de la población indígena; aclaran su desacuerdo con las políticas del Estado y los grupos disidentes; se declaran en asamblea permanente, con el objetivo de establecer la reorganización de su territorio y supervivencia de los resguardos; rechazan los enfrentamientos dentro de sus territorios; piden el respeto a la autonomía de comunidad indígena, se oponen a los bombardeos en el páramo y exigen a los organismos de DDHH estudiar la problemática que les atañe. 

 

En apartes del mismo, argumentan: “Los pueblos indígenas pensamos que la paz no se logra amenazando, ni desplazando con balas de fusiles, de metralletas, de minas, con carro bombas y mucho menos matando niños, jóvenes y ancianos indígenas inocentes, la paz se logra pensando con la cabeza y con el Corazón, donde florecen las ideas colectivas para construir y no para destruir, como según se deja ver en las mentes dementes de los actores de este hecho que enlutan las familias de los pueblos indígenas de Colombia”.

 

La última visita humanitaria que se realizó al lugar fue a mediados de marzo del año en curso, se llevó a cabo en coordinación de la comisión de las Naciones Unidas, la Defensoría del Pueblo, Gestión de Paz del departamento y la Personería Municipal de Florencia, explicó, el personero municipal, Homero Montaño, “Dadas las condiciones del lugar ha sido imposible un nuevo desplazamiento”.

 

El resguardo Triunfo Cristal Páez, está ubicado en la parte alta montañosa del municipio de Florencia; se encuentran adscritas 1.500 personas de la comunidad San Juanito y Casa Plancha. Su economía se basa en la agricultura de hortalizas y frutas, algunas familias viven de la ganadería; cuando los enfrentamientos se agudizan, tienen inconvenientes para el libre desarrollo de sus actividades mercantiles y propias, por eso solicitan una polìtica de paz contundente para su territorio.

La nueva normativa dictada por el Gobierno se opone a los valores culturales de sus pueblos, y atenta contra la base de su economía. “Hoy nos prohíben la coca, mañana nos prohibirán estar vivos”, expresaron. Las comunidades indígenas y campesinas de Colombia, Bolivia y Perú defienden la hoja de coca por su valor cultural, su uso alimenticio y medicinal, y por ser la base económica de esos pueblos.

 

En Colombia, los cocaleros rechazaron la decisión del gobierno de Álvaro Uribe de prohibir la comercialización y publicidad de productos derivados de la hoja de coca en los supermercados y otros comercios del país. La acción del gobierno forma parte de la política contra las drogas y el narcotráfico, enmarcado en el Plan Colombia, que Uribe lleva adelante financiado por Washington.

 

Los indígenas aseguran que la nueva normativa se opone a los valores culturales de esos pueblos, y que además atenta contra su economía. Ellos dicen que hoy les están prohibiendo la hoja de coca, y que mañana les prohibirán estar vivos.

 

Unos de los líderes indígenas, David Curtidor, explicó que las comunidades de Guambianos, Kamsà, Yanaconas, tienen proyectos de aromáticas de coca, vinos y otros alimentos. “También afecta a la cultura del pueblo colombiano y eso ha indignado a la población colombiana, la ha indignado porque se ha tocado un símbolo fundamental de las culturas indígenas que es la coca", expresó.

 

Los pueblos originarios ancestralmente conciben a la hoja de coca como parte de su cultura. Afirman que la coca presenta propiedades medicinales. "Para la presión arterial, para los nervios, para los que no pueden dormir. Estos usos no son de ahora, estos usos son milenarios y esto es más antiguo que el Estado colombiano, más antiguo que Estados Unidos que es el que está detrás de todo", consideró Carlos Mamanche, médico indígena tradicional.

 

Si bien, los productos fabricados con coca son ofrecidos desde hace años en mercados callejeros, supermercados y tiendas naturistas, nunca tuvieron registro sanitario del INVIMA, que toleró su venta y emisión de registros a los pueblos indígenas, por la autonomía otorgada por la Constitución a esas comunidades pueblos indígenas.

 

Pero, ese acuerdo nunca quedó plasmado oficialmente, y ahora el INVIMA comunicó a las secretarías de salud de todo el país que acaten la prohibición. Unas cuantas unidades de té y gaseosa de coca fueron decomisadas en varios comercios del país.

 

En tanto, cocaleros de Perú atraviesan por un contexto de características similares. Campesinos de la región Huánuco, unos 400 kilómetros al noreste de Lima, levantaron una huelga que mantenían desde hace tres semanas tras acordar con el gobierno de Alan García la formación de una mesa de trabajo para analizar sus demandas.

 

El 16 de abril pasado habían iniciado un paro en contra de la política antidroga de García, que estableció tolerancia cero al narcotráfico. Esa acción estableció la erradicación de cultivos ilegales y destrucción de laboratorios de producción de cocaína.

 

Tomado de: www.biodiversidadla.org

 

Fabrizio y Jordano, dos de los 140 bebés peruanos que fueron sometidos a un experimento de la empresa Ventria Biosciences con sustancias derivadas de arroz transgénico, muestran alergias desde entonces, según declararon sus madres a la prensa (La República , Perú, 20/7/06).

 

Según el testimonio de Diana Canessa Garay, madre de 24 años, el año pasado llevó a su bebé de ocho meses al Hospital del Niño, en Lima, con un cuadro de diarrea severa. Una médica le ofreció entonces administrarle un "suero de arroz", lo que la joven de 24 años aceptó ya que no tenía razones para desconfiar de la "autoridad médica", y le preocupaba lograr la pronta recuperación de su único hijo.  Firmó entonces la autorización que le pedían para poder administrarle el medicamento, sin comprender realmente las consecuencias que podría tener.

 

Diana no sabía entonces que su hijo, que ahora tiene dos años, pasó a ser objeto de un experimento de una empresa biotecnológica estadunidense que no estaba autorizado en el país sede de la empresa, con sustancias no aprobadas para el consumo en ninguna parte del mundo.

 

Según la madre, luego de que le dieron este suero, el bebé comenzó a manifestar alergias y actualmente es "enfermizo, delicado, alérgico a todo".  Agrega "me engañaron, sólo querían experimentar con mi bebito".

 

El experimento, que ahora ha sido denunciado por varias organizaciones internacionales y peruanas de derechos humanos, consumidores, ambientalistas y la Asociación Médica Peruana, consistió en administrarle a un grupo de bebés con diarrea, un suero de arroz con las proteínas recombinantes lactoferrina y lisozima, producidas en Estados Unidos en arroz transgénico modificado con genes humanos sintetizados. (para más detalles ver artículo "Bebés como conejillos de indias", La Jornada, México, 1/7/06)

 

Justamente, la posibilidad de provocar alergias de los fármacos recombinantes producidos en plantas transgénicas, es uno de los riesgos que varias organizaciones estadunidenses, incluyendo el Center for Food Safety (Centro para la Seguridad de los Alimentos), habían alertado a las autoridades de su país cuando Ventria solicitó aprobación para cultivar este tipo de arroz en California.

 

Según el informe de ésta y otras organizaciones, sustentado con numerosas referencias científicas, las proteínas recombinantes - derivadas de organismos transgénicos- no son idénticas a las producidas naturalmente. Las diferencias pueden ser tan sutiles que en laboratorio pueden ser difíciles de detectar.  Sin embargo, el sistema inmunológico de los seres humanos sí es sensible a estas diferencias y puede generar anticuerpos, que en algunos casos llevan a la reacción crónica a muchos otros alimentos o sustancias a los que antes el paciente no era alérgico.

 

En la respuesta que emitió a los cuestionamientos de Asociación Pro Derechos Humanos de Perú, el director del Instituto Especializado en la Salud de Niño, doctor Dante Figueroa Quintanilla, uno de los responsables del experimento, argumenta, entre otras cosas, que "en la medicina moderna se emplean lícitamente proteínas recombinantes para mejorar la salud de las personas, por ejemplo insulina, hormona del crecimiento, factores de coagulación y hematopóyeticos".

 

Justamente, en todo los casos citados por Figueroa Quintanilla han habido problemas de algún tipo, pero como ya es común en el caso de los transgénicos, la poderosa industria biotecnológica se ha ocupado de que sean escasamente difundidos y poco conocidos.  Es inexcusable que un director de hospital, que firma su acuerdo para exponer a bebés a un experimento con proteínas recombinantes, no las conociera, o peor aún, no las tomara en cuenta.

 

Por ejemplo, la insulina recombinante, uno de los ejemplos más usados por los promotores de los transgénicos para señalar los supuestos beneficios de estos productos, conlleva una historia de ocultamiento y manipulación sobre sus efectos dañinos.  En 1999, la Asociación Diabética Británica, dio a conocer un extenso informe -que había ocultado varios años debido a las "donaciones" que reciben de empresas farmacéuticas y de edulcorantes que también contienen transgénicos- según el cual, habían recibido quejas de casi el 10 por ciento de sus miembros (equivalente a 15 mil personas), directamente asociados con el cambio de la insulina animal a la insulina transgénica.

 

Los daños reportados iban desde malestares leves hasta la ausencia de síntomas previos al coma diabético, que es muy grave porque puede llevar al paciente a la muerte, al no tomar medidas para enfrentarlo.  Se ha documentado también la generación de anticuerpos en

el caso del uso de factores de coagulación y hormonas de crecimiento.  En un caso particular (MGDF) fue retirado de las pruebas clínicas porque la formación de anticuerpos provocaba hemorragias.  En otros casos, siguen en circulación pese a que se conocen sus efectos dañinos, en parte porque las empresas los ocultan o minimizan, en parte porque eliminan otras alternativas o cuentan con poderosos cabilderos para impedir que se conozca

la verdad y se tomen acciones consecuentes.

 

Igual que con los transgénicos agrícolas, son abultados los expedientes ocultos de los transgénicos de uso farmacéutico, ya que si se conocieran en totalidad, no habría justificación para que estuvieran en el mercado.

 

En el caso de Ventria en Perú, parece que, además, están dispuestos a seguir el triste camino que han recorrido muchas empresas farmacéuticas de usar a las poblaciones del tercer mundo para hacer experimentos no autorizados en su país.

 

*Silvia Ribeiro es investigadora del Grupo ETC

 

Nunca hemos sabido comportarnos en los cumpleaños. Apenas anoche caímos en cuenta que el tiempo pasa y ¡tras...!; las cuentas en el calendario nos dicen que tenemos una edad. La nuestra todavía es de un bebe: siete añitos diría el infante. Y la verdad, nos parece toda una vida.

 

Lo cierto es que no tuvimos tiempo para preparar la celebración, para vestirnos de gala, para lucir “bonitos” despertando el interés de nuestros amigos, aunque algunos crean que el siete no signifique nada (¿?), pero, ¡Oh sorpresa!. Recorriendo esa inmensa enciclopedia en la que se ha convertido la red, o sea nuestro espacio natural, nos encontramos esta primera aproximación:” Tu Karma es de sabiduría y misticismo. Eres el eterno buscador del conocimiento. Estudias, aprendes de todo y de todos. Eres más bien solitario, filosófico, pero tienes la necesidad de compartir con otros tus conocimientos, por eso escribes o eres maestro, profesor o conferencista”. Parece hecho para nosotros. Y yo que personalmente he manifestado mi gran escepticismo frente a estas profesiones de adivinos y pitonisas. Pues el acertijo esta en aquello de solitario, filosóficos, compartidos, conocimiento, aprendices de maestro y transmisores de información. Un poco forzado el ejercicio, pero vale la pena.

 

Hemera, que no embera, es luz del día. Tres reuniones largas, algunas con vinos encima, nos costo a Olga Luz, al profesor Iriarte, al maestro Antonio  y a mí, llegar a la conclusión que ese era el nombre perfecto. Creo que jamás hubiéramos llegado a esa conclusión, a no ser por la valiosa ayuda de mi hija, que ojeaba un diccionario de mitología griega. ¡Dios y los diccionarios! La verdad es que primero “cranianos” el nombre, después ya veríamos que hacer con él.

 

Aunque, a decir verdad, por esos días sólo pensábamos en crear alguna sociedad anónima o limitada para sortear la difícil situación del momento, pues casi todos nosotros, “quijotes de una propuesta pedagógica” que impulsábamos en la Universidad Central, habíamos sido despedidos. El florero de Llorente fue una tarjeta plástica que un profesor se negó a recibir para tramitar ante un banco sus honorarios. La solidaridad efusiva, primero de los docentes y luego de los estudiantes y ¡PUM! Más de sesenta docentes despedidos… adiós proyecto pedagógico, al menos en esa universidad. Y la oportunidad se dio en julio del 99, cuando con otros amigos decidimos crear la Fundación.

 

Y cómo no detenerme un momento y pronunciar con cariño y respeto un nombre: JAVIER ENRIQUE CAMACHO. Era mi alumno en la materia de producción de televisión. Escasamente lo veía en clase, pero se me acercaba y me hablaba como el más erudito de los estudiantes. Parecía ser un experto y cuando se acercaba, lo hacía para compartir conmigo sus ideas sobre el trabajo final de la materia. Su recursividad, sus dotes histriónicas y su resolución para asumir nuevos retos, nos llevó al profesor Iriarte y a mí a colocarlo como coprotagonista del cortometraje “Sangre Maleva”. Esta experiencia nos sintonizó en otros propósitos, entre ellos, el crear una entidad que se dedicara a estudiar temáticas como la comunicación comunitaria.

 

En ese empeño que compartíamos con Olga Luz y Freddy Leonardo, se sumaron otros amigos como Carlos Alberto, Jair y Clemencia. Me he detenido un poco en Javier, porque la maldita violencia que carcome este país se lo llevó apenas dos meses después de creada la Fundación. Javier, aún seguimos soñando tus sueños.

 

Por eso decía algo talvez manido, tratándose de la edad, del tiempo que transcurre, sobre todo tratándose de una entidad que trabaja la temática étnica, especialmente la indígena. Los siete años de Hemera se han convertido en toda una vida y en este transcurrir del tiempo hemos adquirido nuestra mayoría de edad. Somos una voz legitimada para decir y opinar, para comunicar y actuar sobre ese mundo maravilloso y especializado  que constituye lo étnico, que constituye la diversidad de un país.

 

No sería serio hablar de Hemera sin mencionar a quienes han ayudado a hacer de esta entidad lo que hoy constituye su patrimonio político, social y ético. Primero, esos actores de primera línea que son las organizaciones de los pueblos indígenas, afros, raizales y gitanos; sus líderes, que en diferentes etapas han contribuido a nuestra consolidación, muchas veces sin saberlo: Alberto Achitó, Ezequiel Vitonás, Alfonso Palma, Francisco Guerrero, Eulalia Yagarí, Francisco Rojas Birry, Anatolio Quirá, Jesús Piñacué, Gerardo Jumí, Leonor Zalabata, Luis Evelis Andrade, Marcos Avirama, Lorenzo Almendra, en fin, son tantos los líderes indígenas que han contribuido a este proyecto, y los afros, Zulia Mena, Carlos Rosero, Carlos Rúa, Pastor Murillo; y los gitanos, Dalila Gomez, Venecer Gómez y los raizales, en especial Juvencio Gallardo.

 

La lista de los profesionales que han pasado por nuestra entidad es igualmente larga. Muchos, la gran mayoría, aun después de terminado un contrato, se siguen considerando ejes de nuestra entidad. Con cuanta alegría reseña uno notas como la enviada hoy por Alejandro Camargo, que sin saber nada de nuestro cumpleaños, nos dice “Espero que mi permanencia en Montería no sea sinónimo de desarticulación con la Fundación. Quiero manifestarles que aquí tienen un servidor, un "representante",  que en lo que les pueda colaborar desde aquí con mucho gusto. Estoy muy agradecido con la Fundación por muchas cosas y quiero retribuir ese agradecimiento poniéndome a disposición en lo que en medio de la distancia física me permita. -Tal vez escribiendo cosas para el periódico, entregando los diplomas de DDHH, en fin...-“.

 

En estos siete años son muchos los proyectos impulsados por nuestra entidad, TODOS, con ese perfil inconfundible de lo étnico. Entonces como no recordar de manera especial y muchos tendrán que perdonar mi mala memoria, a compañeros como Jorge Tamayo, Christian Díaz, Diana Martínez, Jaime Barrientos, Alma Montoya, Mavis Lizarazo, Jairo Trujillo, Francois Correa, Esther Sánchez, Arles Nova, Martha Gutiérrez, Clara Restrepo, Andrea López, Adriana, Álvaro Vargas, Omar, Carlos Andres, Carolina, Juan Carlos, Ana María, Josefina, Pilar… La lista es larga y si no menciono a los actuales, a Margarita, a Claudia, a Paola, a Natalie, a Mónica, Héctor, Carmen Aurora, Gerardo y Luis Fernando, se va a pensar que tengo una predilección especial por el pasado.

 

Cuesta creer en todo lo que se puede construir en un lapso de tiempo, aparentemente tan pequeño. Nosotros somos esta familia. No siempre hemos cosechado los mejores recuerdos, pero nuestra vocación por hacer las cosas bien jamás ha estado en duda.

 

Sobre esa vieja ilusión de trabajar por el desarrollo de la televisión comunitaria, primó el interés, la experiencia de algunos de nosotros y la experiencia acumulada por muchos de los reseñados, de trabajar por el desarrollo de la comunicación y el desarrollo de los grupos étnicos, especialmente de los pueblos indígenas. Hoy, nuestro patrimonio es un proceso acumulado al servicio de las comunidades. Como niño en crecimiento, estamos orgullosos de mostrar nuestro traje nuevo, que lo lucimos todos los días. Nos referimos al Periódico Actualidad Étnica y al Sistema de Información Etnias de Colombia. Ese es el mejor regalo que día a día les otorgamos a nuestros lectores. Y por todos ustedes, vale la pena seguir creciendo, seguir madurando, seguir contribuyendo a la construcción de esta red, de la cual nosotros sólo somos un delgado hilo de Ariadna, en el laberinto de la comunicación, la vida y el desarrollo de los grupos étnicos.

 

Bogotá, agosto 25 de 2006.

Durante el ciclo de conferencias “Encuentros en la Diversidad” se cumplió el día 17 de mayo la cita en el auditorio Aurelio Arturo sobre la ponencia de afrocolombianidad e interculturalidad puesta en escena por Wilmer Villa, profesor de las Universidades Distrital y Pedagógica e investigador del grupo etnicidad, colonialidad e interculturalidad.

 

En busca de reafirmar los objetivos de la Cátedra de Estudios afrocolombianos enmarcada dentro de la  ley 70 de 1993, el ponente Wilmer Villa enfatizó sobre la importancia del lugar de enunciación como claro responsable en la construcción de identidades tanto personales (“yo”) como colectivas (“otro”). Su carácter recíproco sitúa al imaginario de identidad en un punto crítico de lucha por la supremacía y el poder sobre el “otro”, este conflicto tiene como argumento principal, dar esencialidad, lo que es falso, a los integrantes de una etnia en particular.

 

Y de ser así, ¿en dónde quedaría el legado que buscan las comunidades para solventar su identidad?

 

El mismo Wilmer Villa propone que se rompa esa gran grieta iniciada anteriormente por Walter Mignolo cuando postula un pensamiento desarraigado de los colonizadores, que esté en pro de las necesidades locales, culturales, ambientales y lingüísticas, de una comunidad que se imaginó bajo un referente impuesto y lamentablemente aceptado bajo nuevas formas de colonialismo, de incivilizados.

 

Para destrozar esta mentalidad se debe hacer participe a todos los colombianos, sean del color que sean, y favorablemente comenzar el proceso en la escuela para reconstruir una generación bajo el imaginario de diversidad cultural, que más allá de reivindicar a quienes han sido excluidos por miedo a devolverles la marginalización a otros, proponga la construcción en acción de pensar una comunidad para la paz que se logra aceptando y respetando la historia, cultura, lengua, y creencia de todos.

 

Para ello comenta Wilmer Villa, “se debe revisar conjuntamente la herencia señorial de un país acostumbrado a mofarse de los demás y a reírse con indolencia”. Pues, como él mismo afirma, “el sujeto no puede constituirse por el mismo, debe interactuar con los “otros””. Debe reconstruirse y recrearse con base al imaginario que tienen los demás sobre él porque no puede negarse a un ambiente y a una naturaleza social y colectiva.

 

Como nos lo recuerda José Martí en su ensayo, Nuestra América, "el buen gobernante en América no es el que sabe cómo se gobierna el alemán o el francés, sino el que sabe con qué elementos está hecho su país”.

 

Por lo que la cátedra cumple con el afianzamiento cultural que deben tener los afrocolombianos por su historia esclavizadota y por otro lado el romper con el manto que invisibiliza los distintos referentes culturales, más que todo visto este manto en los medios masivos que están re-institucionalizando un patrón de prestigio “blanco” racista, que discrimina, en muchos casos, otras formas de hablar y de desenvolverse en la cotidianidad.  

 

También cabe distinguir que la falta de producción de imaginarios regionales con prestigio, ha hecho que en épocas de globalización el mito fundacional se extinga provocando declives en la juventud que opta por caer en drogadicciones, que acaban con su vida más que el alto índice de suicidios que atestiguamos en esta época. Las narrativas fundacionales de mi barrio, de mi comunidad, de mi país disponen el valioso propósito por encontrar mi hogar ó mis raíces.

 

 

Casi todas las tarjetas postales provenientes de Bolivia están ilustradas con uno o varios rostros de indígenas del área andina.

 

La publicidad que busca motivar la visita a este país y los mensajes dirigidos al público nacional paulatinamente ampliaron las imágenes de población andina, incluyendo otras de algunos pueblos originarios de las denominadas tierras bajas; pero, el común denominador estuvo concentrado en mostrar imágenes fijas y “congeladas” de dichas poblaciones.

 

En los días precedentes, entre el 5 y el 7 de agosto, en la ciudad de Sucre se ha producido un doble des-congelamiento de dichas imágenes.

 

Motivados por la instalación de la Asamblea Constituyente, miles de mujeres y hombres de todas las edades, provenientes de la totalidad de los pueblos y nacionalidades bolivianas, convirtieron a las plazas y avenidas de la capital de la República en postales y afiches en movimiento y la población boliviana decodificó colectivamente su propia realidad.

 

Allí mismo, entre los 255 constituyentes que asumían el desafío de elaborar una nueva carta política que legitime las demandas de los movimientos sociales, una mayoría muy significativa representaba a los pueblos indígenas y originarios.

 

Nunca antes en Bolivia se había dado la presencia simultánea de pueblos y nacionalidades motivados por un evento político. Esta vez no fueron invitados de segunda o tercera categoría y no acudieron a tratar de vender alguna artesanía para su sobrevivencia.

 

Estuvieron allí para decir -más bien- que quieren el surgimiento de una Bolivia diferente, a decir de un constituyente, los pueblos y nacionalidades acudieron para respaldar “el trabajo por la Bolivia que nunca se pudo construir”.

 

Construyendo consensos en medio de las diferencias.

El Movimiento al Socialismo ha logrado vencer la difícil etapa de la fase preparatoria de la constituyente, mediante la conformación de un directorio con presencia de casi todas las fuerzas políticas.

 

Silvia Lazarte, mujer indígena de origen quechua, ex dirigente sindical de los cocaleros del Chapare, elegida en representación de Santa Cruz, presidirá las deliberaciones durante un período fijado entre 6 meses y un año, ella en su discurso combinó la sencillez de su origen con la firmeza de sus convicciones, reivindicó su origen y su condición de mujer y convocó a un trabajo entre iguales y sin exclusiones.

 

Ahora se mantiene la expectativa por el trabajo. Evo Morales y Álvaro García Linera, presidente y vicepresidente de los bolivianos, ratificaron la responsabilidad que tiene la constituyente en la superación de la exclusión y en dotar a la revolución boliviana de una estructura básicamente social y comunitaria.

 

Los representantes de los partidos de oposición prácticamente se excusaron en brindar opiniones de fondo y prefirieron sumarse a las expresiones de buenos deseos para el naciente cuerpo colegiado de constituyentes.

 

No obstante ello y con seguridad, no tardarán en surgir las diferencias.

Para utilizar nuevamente la alegoría con la que iniciamos esta nota, se podría decir que ahora los partidos tradicionales y los sectores sociales que controlaron la vida política boliviana forman parte de las “imágenes congeladas” y les costará mucho trabajo dejar dicha condición.

 

La expectativa que recorre a Bolivia es que, junto con las diferencias será necesaria la búsqueda de consensos sobre la base de una hegemonía social y comunitaria. Tarea muy difícil pero no imposible. El tiempo, que no será muy largo, ratificará o rectificará esta opinión.

 



Entre los días 08 y 12 de octubre de este año los indígenas y campesinos de Bolivia, Ecuador y Perú se reunirán en la ciudad de La Paz para oponerse a los Tratados de Libre Comercio (TLC) y el ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas). El Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyo y la Federación Nacional de Mujeres Campesinas "Bartolina Sisa", de Bolivia; la Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador; la Confederación Nacional de Comunidades del Perú Afectados por la Minería y la Organización Nacional Indígena de Colombia, entre otros, son las organizadoras del encuentro.

Las entidades también harán un homenaje y un festival a 36 años de la muerte del legendario guerrillero Ernesto Che Guevara. En 12 de octubre se realizará una marcha de protesta pero también de festejo, al cumplirse los 514 años de invasión del continente.

Según informaciones de la agencia Rebelión, en un documento titulado "De la resistencia al poder", los organizadores afirman que "después de 513 años de colonialismo interno y externo, de políticas que apuntan al sometimiento, marginación y exterminio, los pueblos y nacionalidades indígenas del Abya Yala, denominado continente americano, nos encontramos de pie y dispuestos a construir un futuro mejor".

"Nos oponemos a las políticas guerreristas e intervencionistas contra pueblos dignos del mundo; condenamos la militarización y el pisoteo a la soberanía y dignidad, y además rechazamos la política de satanización y criminalización a nuestras organizaciones y dirigentes", sostienen. En el "Abya Yala - como se nombra al continente americano - nos solidarizamos con los procesos de Bolivia, Cuba y Venezuela, así como otros movimientos que empiezan a construir sistemas solidarios y horizontales", señalan.

Actualidad Étnica, 24/07/2007. “Han pasado y pasan a las Indias algunos Gitanos y vagabundos, que usan su traje, lengua, tratos, y desconcertada vida, entre los indios, a los cuales engañan fácilmente por su natural simplicidad, y porque en estos reinos de Castilla (…) son tan perjudiciales, y conviene, que en las Indias, por las grandes distancias, que hay de unos pueblos a otros, y tienen mejor ocasión de encubrir, y disimular sus hurtos, apliquemos el medio más eficaz para librarlas de tan perniciosa comunicación y gente mal inclinada” (Citado en Gómez, Alfaro, 1982:313).

 

Este extracto de una ley aprobada por Felipe II en el año 1581 exige el inmediato reenvío hacia la península Ibérica de los Gitanos que habían logrado llegar a las Indias a pesar de las prohibiciones, siendo éste el lugar hacia donde contradictoriamente se plantea expulsarlos dos siglos más tarde, ya que “no se ha encontrado a ningún país ilustrado y dominante mejor medio que la expatriación de los malhechores a las colonias, para poblar éstas, no descarnar la matriz de pobladores útiles y librar la capital de ciudadanos perniciosos”(en: Gómez, Alfaro, 1982:321). Estas referencias históricas son testimonio de cómo, en este caso a través de la legislación, se perpetúa la categorización y los estereotipos de los Gitanos como “perniciosos” o “vagos” y de los indios como “naturales” y “simples”, y da cuenta del concepto en que se tenía a estos grupos humanos que no comparten la misma forma de pensar y vivir el mundo.

 

Este artículo no pretende ser un estudio teórico sobre la construcción de la identidad étnica en referencia a temas de contacto cultural, sino ilustrar, a través de una historia de vida que relata el contacto entre un grupo de Gitanos Rom itinerantes y los habitantes de un pequeño pueblo en los Andes de Colombia, cómo el imaginario que se crea a partir del contacto entre dos culturas y la interpretación de los mismos sucesos refleja no sólo hechos, sino también la concepción del mundo por parte de los participantes, y cómo estereotipos que se van reproduciendo históricamente se dinamizan en la realidad.

 

La población Gitana ha migrado a Colombia como minoría étnica en varios momentos históricos y en condiciones muy diferentes, y está conformada por grupos que tienen como referente estas migraciones y las subdivisiones dentro de los mismos. Parte de esta población se encuentra sumergida e invisible. Hay constancia de Gitanos Kalé y Rom, estos últimos, subdivididos según una nomenclatura de oficio ancestral como, en este caso, por ejemplo, los Kalderash (herreros) y los Boyas (lavadores de oro) (Véase también Gamboa, Gómez y Paternina, 1999:6).

 

La historia de vida es la de Gilma, una chica de Almaguer (Cauca), quien se casó con Emilio, un Gitano Rom itinerante, y está recogida en varias voces y retomada en diferentes tiempos y generaciones. Se sitúa en los tiempos de La Violencia en la década de los cuarenta y cincuenta del siglo XX, y tiene lugar en Almaguer, un pueblo andino de la región del macizo colombiano habitado, en su mayoría, por población campesina con ancestros indígenas (Yanaconas) y mestizos, y que fue enclave importante desde tiempos de la colonia por ser un sitio de paso y comercio que formaba parte del “camino del Rey”, que conectaba el norte de Colombia con la Real Audiencia de Quito en el Ecuador.   

 

Las entrevistas, escritas literalmente y parcialmente reproducidas, van contando poco a poco las diferentes opiniones que se tenía sobre el mismo grupo de Gitanos y los mismos sucesos. La primera parte de la historia, tal como la presentamos a continuación, es la conversación con el hermano de Gilma, que nos cuenta lo sucedido con un recuerdo y visión positivos de sus contactos y del modo de vida de los Gitanos, a pesar de la contradicción que su historia presenta. En la segunda entrevista, la madrina expone su extrañeza hacia el modo de vida de los Gitanos, y finalmente se entrevista a Luz Mila, la hija de Gilma, quien nos da a conocer la opinión de los hechos.

 

Entrevista a Gerardo, hermano de Gilma

 

“El esposo de mi hermana Gilma se llamaba Emilio Gómez. Ellos llegaron a Almaguer en el año de 1947, no sé… como unos quince juntos, también llegó el papá… a caballo llegaron… eran unas carpas grandes, todos dormían dentro. Mi hermana Gilma como era muy bonita… pues este Gitano Emilio se enamoró de ella pero esos amores duraron muy poco. Se casaron por la iglesia, el padre Muñoz les casó, fue una fiesta muy bonita, la fiesta fue en La Vega, allí habían toldado, mataron dos cerdos, las Gitanas asaban enteros los cerdos y nos daban los trozos de tocino y yuca. Ellos dormían en unas alfombras o tapetes rellenos de plumas y uno se sentaba en uno de esos y el mismo colchón los cubría. Entonces a la fiesta fue mucha gente. Después se fueron para Bolívar y allí se la pasaron unos días. Mi mamá se la pasaba llorando, sentada en la cama y yo como dormía en el mismo cuarto… la veía con la pena de Gilma. Es que mucha gente piensa que son unos vagabundos y estafadores y mi mamá se preocupaba.

 

“Para no verla llorar más… se habían ido a toldar a San Lorenzo y nos fuimos con mi mamá a pie hasta San Lorenzo y nos pusimos a preguntar hasta localizarlos. Yo le escribí un papel a ella contándole lo de mi mamá, y entonces Gilma me atendió y nos volamos con Gilma por platanales y cafetales, y los Gitanos nos regresaron para San Lorenzo.

 

Fuimos hasta la estación de policía y ellos dijeron que hablarían con el esposo pero que si ella quería se volviera con su mamá para Almaguer. Luego los llamaron a la inspección y allí le preguntaron que qué quería hacer, quedarse con su esposo o irse con su mamá. Gilma decidió quedarse con su esposo y mi mamá siguió llorando y yo muy angustiado.

 

Un día me fui para La Cruz (Nariño), y llegué y se habían ido a San Bernardo, y le pedí a un coger que me llevara y me ayudara; él habló con ella y ella vestida de Gitana vino y dejó todo para irse conmigo para Almaguer. Los Gitanos habían estado pendientes y se levantaron todos y alerta, con caballos a todo galope. Llegamos a La Cruz y allí nos conocían y nos invitaron a un baile; teníamos muchísimos amigos y estábamos bailando tan rico, entonces llegó el telegrafista y me dijo que los Gitanos vendrían de San Lorenzo y llegaban esa misma noche.

 

 Nos dañó toditico. Dije: vámonos para San Pablo porque vienen esos Gitanos y te devuelven… nos fuimos a pie por la carretera y llegamos al ladito de una casa del santuario de la virgen de La Playa y nos hospedaron y dormimos en el suelo. Al otro día nos levantamos y le dije: vamos a rezar a la virgen y le habíamos pedido con tanta fe… por allá casi no pasaban carros y de repente pasa uno y lo paramos y le preguntamos al señor para dónde iba… él dijo que iba para Bolívar y le dijimos que por Dios nos llevara… Súbanse allá arriba en la carga, y lo hicimos y llegamos así a Almaguer… total que el matrimonio en ese momento se acabó.

 

“No le teníamos miedo a los Gitanos… yo lo hice por pena de mi mamá y ella… lo hizo por consideración con mi mamá que lloraba por ella. La trataban bien, yo le hice un mal a mi hermana, porque luego a los dos años volvió el esposo Emilio y estuvimos bien en Almaguer, pero mi hermana ya había tenido una niña de un alcalde que estuvo en Almaguer y ellos se saludaron y todo.

 

“Ellos eran negociantes, andaban con caballos y negociando, y conseguían muchos amigos. Las mujeres adivinaban la suerte no más; ellos me enseñaron a hablar un poco de Gitano. Me enseñaba la Susana, una mujer linda, la hermana de Emilio y otra niña que llamaba Rosa, muy bonita, de unos ojos lindísimos. Yo estaba feliz, pero feliz… pero se nos dañó el cuento con lo de mi mamá, porque mi mamá lo tomó a pecho y se hubiera muerto. Yo no… no creo en esa vaina de leer la mano y estas cosas… eso que hacen los Gitanos son puros trucos. Yo no creo en eso, eso es viveza de ellos. Gilma sabía muchas cosas que los Gitanos le habían enseñado y sabía cuándo a una persona le hacían maleficio y le decían que fuera a tal árbol y me decía a mí… andá y escarbás y abrís un hueco y metés todas estas porquerías. Entonces le decía al hombre que fuera y que en tal parte le habían hecho el maleficio y que tomara eso y lo pusiera en una bolsa de plástico y lo echara al río con esas cochinadas, y eso son puras vivezas y por eso yo no creo en eso.

 

“Y así fue… al tiempo llegó Emilio y se saludó con mi hermana y yo le conté porqué habíamos hecho eso y luego nos encontramos en Morales, un pueblo vecino, y nos saludamos… ellos bailaban muy bien. Emilio era nacido en Puerto Rico y cantaban y bailaban con guitarras. Ellos recorrían toda Colombia. Hoy la mayoría de ellos han muerto.

 

“A la lengua de ellos le decían el turco-catalán, pero más catalán. Todos… desde que hicieron la fiesta de matrimonio, los Gitanos la aceptaron a mi hermana muy bien y con fiesta muy linda. Ella se vistió de Gitana, con falda larga y floreada y una blusa muy bonita ajustada a la cintura; en la cabeza un turbante que la adornaba y una pañoleta, aretes y collares. Gilma, muy bonita ella y Emilio un hombre muy bien parado… el hombre ¿pa qué?, nadie puso inconveniente. Él tenía 21 años y ella 17 años, muy joven, ella nos dijo que se casaba y nosotros le dijimos que bueno, porque él era un buen hombre con sus caballos y trabajaba mucho andando por allí.

 

“Los Gitanos se la pasaban comiendo carne de cerdo y eran muy aseados. Ellos siempre se pasaban cuidando las bestias, alisándolas y lavándolas. Las mujeres andaban de casa en casa buscando su trabajo, vendiendo cosas y adivinando… había un dicho de antes que era así: “hay que hacerse adivinar la suerte para vivir despreocupado”.

 

“Cuando nos encontramos en Morales también me encontré con Rosa, la Gitana, y yo estaba muy enamorado de otra muchacha, y le pedí a Rosa que cuando le adivinara la suerte a ella, le dijera que yo era el hombre de su vida y que no podía cambiarme por nadie y así me ayudó Rosa”.

 

Entrevista con Mery, la madrina de matrimonio

 

“En este tiempo en Almaguer era muy bonito que los Gitanos llegaran; la gente se ponía muy alegre y llevaban caballos muy finos… muy buenas temporadas… llevaban ferias, presentaban como un circo. Ellos tenían unas costumbres muy arraigadas y las Gitanas vestían con sus faldas, leían las manos… eso era lo que hacían, leían el futuro pero no lo saben. Ellos leían también las cartas, y los hombres, con los caballos de paso fino por lo general… unos hombres bien parecidos. El enredo de Gilma y Emilio fue que se casaron y yo fui la madrina. Yo les regalé un juego de vasos metálicos.

 

“Los Gitanos dormían en camastros y dormían así y llevaban esa vida. Mi mamá por eso decía cuando se quería ir: ¡ya se van a hacer correrías como los Gitanos!, como si fuera la cosa más horrible.

 

“Vivían todos amontonados. Vivían como la cosa más rara esa gente; yo no se, muy rara esa convivencia de amontonarse todos, durmiendo todos juntos ahí en esas carpas y cogían las comidas todo tan revuelto, un desorden muy raro, muy desordenado, de estar uno bien y ellos así de solo caminar. Los camastros eran una cosa de amontonar, ponían todas sus cosas, sus mercancías y allí dormían.

 

“Ellos andaban así negociando. La gente de Almaguer les tenía confianza; la gente llegaba a amistarse con ellos; mi suegro hablaba mucho con ellos; mi hermano Saúl también. Ellos eran simpáticos. Tenían unas pintas lindas y nos gustaba entablar relaciones con ellos, y a Gilma, cuando se casó con Emilio, el Gitano, no le decían la Gitana sino la turca. Entonces ella se quedó así, como la turca.

 

“Hacían fiestas, ellos hacían fiestas y tocaban la guitarra y cantaban. Por ejemplo, a mi tío Neptalí… le gustaba mucho estar con ellos por eso. Tenían un aparato parecido a las organetas. La gente les invitaba. A veces se decía que ellos se robaban las gallinas, no se… ellos andaban por todos lados. Eran ocho mujeres, y una, la más anciana, la llamaban “La Veterana”. Ella era la más preparada y la más educada. Los muchachos de Almaguer andaban detrás de las Gitanas, ellas eran jóvenes y lindas. Ellas no hacían sino adivinar las manos y uno les pagaba en esos tiempos diez o veinte centavos y lo que más les dábamos eran cincuenta centavos.

 

“Claro, se separó Gilma…pues ella en esa correría por Bolívar, Florencia y San Pablo, ella se dio cuenta que esa vida no era para ella y su hermano fue a rescatarla y la trajo. Estaban asustados con esa vida de los Gitanos; acampar por ahí y aguantar frío y hambre. Se necesita tener mucha plata para andar y vivir bien y por eso se fueron a rescatarla. Lo que yo les regalé, ¡lo habían vendido! A mi me gustaban mucho los caballos y yo le pedía a Emilio que me prestara uno para pasear. Los cuidaban mucho y los alimentaban con caña de azúcar. Andaban por todos los pueblos, por todo lado por eso. El nombre de Gitanos era de caminar y andar por todas partes. Ellos tenían sus animalitos, sus cositas por allí, que conseguían para llamar la atención, como una cebrita, algunas cosas de los circos, sólo para llamar la atención.

 

En Almaguer acampaban y las carpas eran de color verde con gris y como hechas de retazos de tela, templadas con horquetas de madera que enterraban en el piso. Se vestían con ropas muy anchas, muy coloridas, de muchas flores, andaban sin zapatos, a pie limpio. Ellos si usaban como sandalias de San Francisco… y de adornos, aros muy grandes, que les llegaban hasta los hombros y pañoletas que nunca se quitaban, muchas chaquiras”.

 

Entrevista con Luz Mila, la hija de Gilma y Emilio Gómez

 

“La mamá de mi mamá, doña Eleodora, mi abuela, tenía miedo de que se quedara con su marido porque… eso de que se quedara tan lejos y que, de pronto… el miedo de que la fueran a matar… que le metía otra gente cosas raras en la cabeza, de que los Gitanos la iban a matar, que la iban a asar y de que la iban a meter en un horno y la iban a asar. ¡Esa era la idea que le habían metido!, entonces ese era el miedo que ella tenía por Gilma.

 

“Desde el momento en que me encontré con esa Gitana en la calle de este pueblo… ella me dijo que adivinaba la suerte, que si estaba interesada… y yo le dije que en esas cosas no creía y que eran mentiras y que mi mamá había estado casada con un Gitano y que todas esas cosas eran una forma de ellos vivir. Entonces la señora me dijo que cómo así, mi mamá casada con un Gitano, y que si de pronto se llamaba Gilma... y entonces… y ¿usted cómo lo sabe?, y ella me contestó que Gilma era casada con Emilio. Y entonces le dije que ella era mi mamá y ella preguntó que dónde estaba mi mamá y yo le conté que había muerto.

 

Desde el momento en que yo vi a esta señora se preocupó y que preguntó por mi mamá, yo me interesé y me dio un sentimiento y le dije: señora yo tengo una habitación aquí en Liberia, así que camine, y se va a vivir allí y ahí llegamos a una amistad con ella… y me contó que ella tenía familiares aquí, en Popayán, que sería bueno que me conocieran a mí y que ellos siempre habían estado preguntando, que el familiar de ellas era casado con Gilma y que Gilma había tenido una hija y que ellos me querían conocer y ellos creen que yo era hija del Gitano.

 

“Yo le pregunté a esta señora acerca de que hacía ella, entonces me contó que ella adivinaba la suerte… y yo le dije más o menos a quiénes les iba a hacer propaganda de que ella adivinaba la suerte, y yo le dije quiénes iban a venir y le dije como eran ellas… así y así… ya la puse al tanto de cómo eran los novios, de qué tiempo llevaban y todo lo del trabajo. Y yo les conté, a las otras, que había venido una Gitana y que era una mujer que adivinaba la suerte y que era muy buena y que sabía de todo. Y cuando les adivinó, ellas estaban aterradas… que todo lo que les había dicho era cierto, al pie de la letra. Ellos hablan en ese catalán que ellos hablan y sólo ellos entendían. Yo quedaba a oscuras y no entendía nada. Ellos decían que yo era hija de Gitanos que porque un lunar que yo tengo lo tenía él igual en la espalda y que tenía el modo y el ser de ellos y seguramente que sí fue así.

 

Mi mamá aprendió muchas cosas de los Gitanos, aprendió mucho… a leer el cigarrillo, los naipes, que les iba a quitar el maleficio a las fincas y les colocaba la mata de sábila, que les hacía riegos. Y la gente creía mucho en ella porque les daba resultados, pero también era una forma de ella para vivir porque, a la hora de la verdad, todo eso era pura paja. Ella vivió muchos años de eso y tenía mucha clientela, claro que sí, ella les acertaba mucho.

 

“En la casa de Diego Muñoz que dizque les habían arreglado una pieza y cuando el señor [Emilio Gómez] fue que, dizque, me cargaba y me miraba él y yo estaba muy pequeña y él había ido a ver a mi mamá varias veces, pero con miedo de mi tío porque él era muy jodido y le tenía prohibido a ella de que lo viera… ¡al rojo!, de que si lo veía le trataba de pegar y todo. Este señor me había conocido de pequeñita. Gerardo se había arrepentido, pero ahora ¡ya pa qué!”.

 

Consideraciones finales

 

En esta historia de contacto entre los habitantes de Almaguer y los Gitanos itinerantes se identifican varios puntos de encuentro y de valoración positiva, como las referencias al aspecto mágico. Éstas se evidencian, entre otras, en la lectura de la mano y de las cartas, que causa una fascinación hacia lo extrañó que a la vez es cercano por vivir mutuamente la creencia en lo mágico. Así mismo, la boda celebrada por el rito católico y la fiesta Gitana son compartidas por ambos grupos. También está el intercambio implícito en la itinerancia de los Gitanos y sus oficios, como el comercio de caballos y los productos agrícolas de la región, propio de una economía de autoabastecimiento entre los campesinos del lugar.

 

En la zona donde se realizaron las entrevistas era común y significativo escuchar el impacto de alegría y fascinación que la llegada de los Gitanos a estos pueblos del suroccidente colombiano representaba.

 

Por otro lado, son los mismos elementos a los que nos hemos referido como puntos de encuentro, que para otras personas o en otras circunstancias son vistos y usados como elementos diferenciadores que pueden llevar a la exclusión. Un ejemplo de ello es que, mientras para el hermano de la novia las carpas done duermen los Gitanos representan un espacio acogedor, para la madrina de la boda es “un desorden muy raro, muy desordenado”, “muy rara esa convivencia de amontonarse todos”, la antítesis del orden y de lo social. Lo mismo ocurre con la fascinación o incomprensión hacia la vida itinerante “estar uno bien y ellos de sólo caminar”.

 

Pero el discurso de los actores no sólo ilustra cómo un mismo elemento se interpreta de diferentes maneras, sino que también se atribuyen hechos opuestos al mismo grupo como reflejo de la propia concepción cultural. Mientras que la madrina de la boda sostiene que los Gitanos “acampan por ahí y aguantan hambre y frío”, el hermano de la novia hace referencia a que estos mismos Gitanos “se la pasaban comiendo carne”.

 

Mientras que la historia se desarrolla entre concepciones culturales distintas, el elemento catalizador es, o se justifica con, el temor de la mamá de la novia. En ambos casos se recurre a un estereotipo que ya era común en Europa en tiempos de los griegos para deshumanizar a los “bárbaros” y que se retoma en el caso de los “naturales” o nativos de América: el canibalismo. Como dice Luz Mila: “la iban a meter en un horno y la iban a asar ¡Esa era la idea que le habían metido!”.

 

Retomando estas reflexiones, hemos identificado cómo se seleccionan o crean elementos de diferenciación, tanto para la unidad como --en otros casos-- pa



La Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana, AIDESEP, organización representativa de los pueblos indígenas amazónicos del Perú con 7 organizaciones regionales, 57 federaciones y más de 1,355 comunidades afiliadas nos pronunciamos

Con motivo de celebrarse el "Día Internacional de los Pueblos Indígenas" hacemos un recordatorio al Estado Peruano para que en sus políticas publicas, programas, proyectos y actividades consideren permanentemente la protección, reconocimiento, defensa y respeto pleno de los derechos indígenas reconocidos por las leyes nacionales y tratados internaciones como el convenio 169 de la OIT y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas del Mundo.

Por ello, en este día tan importante para los pueblos indígenas, nos ratificamos ante el gobierno de turno, la opinión pública nacional e internacional, para expresar nuestra profunda preocupación ante la falta de garantía de respeto al desarrollo de pueblos indígenas amazónicos.

I.-Demandamos al Estado Peruano y las empresas extra-activistas nacionales e internacionales el respeto de nuestro derecho al territorio y a los recursos naturales como nuestros bosques que es nuestro hábitat. La actividad de empresas petroleras, mineras han afectado nuestro recurso y con ello nuestras formas colectivas de vida dramáticamente, todo ello es una manifestación mas de cómo se discrimina a los pueblos indígenas y se apropian ilícitamente de nuestros recursos naturales, cuidados por nuestros ancestros durante miles de años.

II.- Denunciamos las constantes violaciones de los derechos humanos, derechos colectivos y el derecho a la libre determinación de nuestros hermanos que se encuentran en situación de aislados voluntariamente o en contacto inicial, por parte de los madereros ilegales con asesinatos solo por extraer maderas ilegalmente de la zona donde ellos viven durante muchos años ubicados en las zonas de Ucayali y Madre de Dios, así como de otros terceros con intereses particulares.

III.- Por todo ello nos oponemos a la actitud inescrupulosa del Estado Peruano que ve en la amazonía y sus recursos naturales, una caja chica con la cual cubrir sus excesos y malos manejos económico, permitiendo la entrada de empresas que buscan solo la máxima rentabilidad, con poca inversión, sin importarles la vida de los pueblos indígenas y el medio ambiente en que vivimos; la encomienda colonial no ha sido abolida en el Perú, solo se le ha cambiado el nombre, ahora se le llama "CONCESIÓN "

IV.- Hacemos un llamado al Presidente de la Republica, Alan García Pérez y al Congreso de la República, que re-evalúen su política y planes con respecto a la Amazonia y los Pueblos Indígenas, quienes hemos observado que su mensaje dirigido a la Nación, ni siquiera hemos sido nombrados, con lo que nuevamente retornamos a la invisibilidad y nuestros sueños reinvidicativos quedan postergados.

El debate de control político en el concejo de Bogotá, sobre la crítica situación del recurso hídrico en Bogotá, pretende promover la necesidad de instaurar un Estatuto del Agua para Bogotá. La cabildante asegura que el modelo de gestión y la administración actual para el manejo de los recursos hídricos, no permite una gestión integral del mismo ni existe articulación entre las instituciones que manejan el ciclo natural del agua en la ciudad, causando un gran impacto sobre cada uno de sus componentes, siendo la más afectada, la calidad del agua.

 

Estos hechos para la cabildante ratifican aun más la necesidad de aprobar un Proyecto de Acuerdo que adopte un régimen jurídico exclusivo, con el cual se planifique y administre el recurso hídrico de la capital; además de propiciar una cultura para su defensa. Para Ati Quigua, es necesario que los colombianos y los bogotanos entiendan la importancia de la gestión ambiental del agua, como eje articulador y vital para los habitantes de la ciudad.

 

La concejala indígena Ati Quigua, tenía previsto iniciar su debate del 14 de septiembre a las 9:00 a.m, sin embargo se retrasó hasta las 11:30 a.m debido a que debates de otros concejales se tomaron más tiempo del previsto. Este retraso determinó que gran parte del concejo estuviera ausente en el momento de la exposición de la concejala.

 

Sin embargo su exposición estuvo cargada de emotividad y simbolismo. Su presentación inicio quemando una hoja de frailejón, explicando que para la comunidad arhuaca esta hoja es la mensajera del espíritu del agua y que su planta nace en los picos sagrados de la Sierra Nevada de Santa Marta.

 

Posterior a este acto simbólico que también que también pretendía abrir la mente de quienes les corre sangre indígena en sus venas y pudieran escuchar mejor el mensaje, continuó citando a los Mamos, (sabios de su comunidad), con unas palabras en su lengua, el mensaje hablaba sobre la importancia del agua para las comunidades indígenas, y que ésta es para todo ser humano la esencia de la vida.

 

El acto simbólico finalizó con un canto, un canto que los arhuacos le ofrecen a la vida desde niños, “para nosotros el agua es un ser vivo, y canto para que no se me olvide cantar, porque ese día no tendría sentido la presencia de los pueblos indígenas”.

 

Al debate fueron citados el Gerente de la Empresa de Acueducto, la Directora del DAMA, la Directora del Jardín Botánico, e invitados el Ministro del Medio Ambiente, la Senadora Nancy Patricia Gutiérrez, el Contralor Distrital, el Personero de Bogotá, la Directora de la CAR y el Director del IDEAM, sin embargo no asistieron.

 

“Quienes dicen estar comprometidos con el agua y el medio ambiente, deberían estar aquí atendiendo el llamado de la primera instancia política de la ciudad, lamentamos profundamente su ausencia y pediremos que se investiguen a los funcionarios por incumplimiento con sus funciones” afirmó a Actualidad Étnica la joven indígena.

 

La concejala aseguró que en Bogotá se han perdido 90 quebradas y los ríos se han convertido en sistema de alcantarilla, “los ríos son como las venas del cuerpo, el agua es el eje articulador de la vía, y no debe ser tratada como una mercancía sino como un recurso vital, un patrimonio público y un derecho humano”.

 

Por su parte Juan Carlos Castro, Asesor de Ati Quigua afirmó que la ciudad debe empezar a manifestar una posición clara frente al tema del agua “se debe empezar a generar expectativa en la ciudad sobre el tema y su importancia y por otra parte debe analizarse cuáles son las deficiencias en la administración respecto al recurso hídrico”.

 

La situación de las privatizaciones del agua en el mundo, el país y la capital

 

Ati Quigua expuso en su debate que América Latina es un continente rico en recursos hídricos y aún así reporta una pobreza crónica. En cuanto a Colombia denuncia que las políticas internacionales (TLC) y la atención del conflicto interno, no han permitido es desarrollo de políticas de Estado en materia de servicios públicos.

 

Afirmó también en su exposición que el Estado ha dado traslado de sus obligaciones al sector privado, iniciando un “proceso de privatización” de los recursos hídricos del país, como es el caso de Técnicas Valencianas del Agua (Tecvasa) de España, la cual logró la concesión del servicio de agua por 20 años. Esta empresa española creada en 1999 y a sólo 3 años de su creación contaba ya con 4 filiales: Metroagua en Santa Marta (Colombia); AAA Dominicana (Santo Domingo, República Dominicana); Aragua en el cantón de Zamborondón (Ecuador) y AAA Venezuela, en el estado de Zulia.

 

En la situación de Bogotá, la indígena asegura que la empresa de Acueducto de Bogotá viene planteando un modelo de modernización, en el cual se ha incorporado una visión mercantilista y ha dado inicio a un proceso de “privatización”; incorporando 5 gestores de zona en la ciudad, Proceso que continuó con la regionalización de la venta de agua en bloque, para lo cual se creó Aguas de Bogotá, y finalmente se planteó la alianza entre la empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), Empresas Públicas de Medellín (EPM) y posiblemente Canal Reina Isabel, empresa española. “Para nosotros los pueblos indígenas esto es mucho más grave, porque como saben los españoles casi nos exterminaron, vinieron por nuestro oro y ahora vienen por nuestra agua” agrego Ati Quigua.

  

www.etniasdecolombia.org

Actualidad Étnica, Ciudad de Guatemala, 24/07/2007. A fines de mayo pasado, Rigoberta Menchú fue proclamada candidata a la presidencia por el partido Encuentro por Guatemala (EG). En su discurso, la Premio Nobel de la Paz sorprendió cuando habló de la necesidad de implementar una política de expropiación de tierras. El desconcierto fue generalizado. Incluso para sus compañeros de equipo que, al ser interrogados sobre la posibilidad de una reforma agraria, afirmaron que ese tema aún no se había discutido.

 

Diez días después, en un foro organizado por el sector privado, Menchú declaró que su propuesta era la de una economía social de mercado y que la expropiación sólo se refería a las tierras que presentaran irregularidades. A pesar de la aclaración, el contradictorio mensaje caló hondo en la opinión pública que no sabe aún cómo será su proyecto político.

 

Ya de por sí, Menchú es un personaje complejo. Un pasado que la vincula con la guerrilla guatemalteca y un Nobel que la acredita como “un símbolo viviente de paz y reconciliación”. Una incursión en el negocio de Farmacias Similares que la relaciona con el mundo empresarial y una trayectoria que la posiciona como defensora de los pueblos “mayas”.

 

Contradicciones o no, su participación demuestra una realidad más importante: El ambiente de tensión y violencia que sufrió Guatemala durante 36 años está superado. “Sólo el hecho de que ella pueda concurrir en un proceso electoral, sin que nadie se oponga, es síntoma de una situación de descongestionamiento en la historia política del país”, señala el historiador Carlos Sabino, autor del libro Guatemala, la historia silenciada (1944-1980).

 

Probablemente, 10 años atrás, los estragos del conflicto armado habrían estado muy frescos y el espacio político para las minorías, muy cerrado.

 

Aun así, cabe preguntarse cuál de sus roles pesará más a la hora de definir esta nueva fase política. Hasta el momento, Menchú se ha presentado como una candidata de toda la sociedad guatemalteca. No de los indígenas. No de las mujeres. No de la izquierda. No sólo porque ninguno de estos grupos pesa lo suficiente como para asegurarle la presidencia, sino porque su proyecto es “multicultural y pluriétnico”. Por eso, Menchú y su incipiente movimiento político, Winaq, optaron por unir fuerzas con EG, un partido joven, “tolerante e incluyente”, según lo define su fundadora, Nineth Montenegro.

 

Sin embargo, conforme la Premio Nobel ha ido integrando sus distintas facetas en un programa político, su imagen ha perdido fuerza y su discurso, coherencia. Según la última encuesta electoral, realizada en mayo por la agencia Vox Latina para el diario guatemalteco Prensa Libre, Menchú alcanza apenas un 2.9 por ciento de intención de voto, lo que la ubica en la cuarta posición de la contienda.

 

Entre la población indígena, los números tampoco fueron alentadores: Apenas un 3.3 por ciento hubiera apoyado a Menchú si las elecciones hubieran sido en mayo.

 

Para el analista político guatemalteco Francisco Beltranena estas cifras destruyen el mito que sostenía que, en un país donde el 60 por ciento de la población es indígena, un candidato indígena arrasaría en las elecciones presidenciales. “En la medida en que nuestra vida democrática ha crecido, alejándose de los fundamentalismos del conflicto armado, el modelo político se ha separado de los elementos religiosos, étnicos y culturales”, explica.

 

El despegue

 

De ahí que la candidatura de Menchú destapara otra realidad: La izquierda guatemalteca está fragmentada, si no, agonizante. Ella misma procuró desligar su propuesta de los movimientos radicales.

 

En este sentido, la alianza con EG supuso, además de un respaldo político sólido, una respuesta a lo que mucha gente se preguntaba desde que las aspiraciones políticas de Menchú se hicieran públicas: ¿sería esta mujer, de origen k'iche', una versión centroamericana del presidente de Bolivia Evo Morales?

 

A su modo muy diplomático, Menchú dijo que no. Ya lo había hecho antes, al excusarse de participar en la III Cumbre Indígena Continental, celebrada en marzo en Guatemala, en la que se esperaba la visita del mandatario boliviano. Esto no quita que Menchú admitiera, en repetidas ocasiones, que respetaba y admiraba a su “hermano” boliviano. Pero una cosa es respetarlo y otra muy distinta querer vincular su proyecto con los postulados del Movimiento al Socialismo (MAS).

 

Además, ser indígena no equivale a tener representatividad étnica. Basta con observar la composición demográfica del país: Mientras que en Bolivia existen dos grupos indígenas predominantes que comparten la misma lengua, en los 13 millones de habitantes de Guatemala hay 23 etnias indígenas que hablan diferentes lenguas y que, en la mayoría de los casos, usan el español para entenderse.

 

Tomado de: Plaza Publica www.plazapublica.org 16/07/2007.

 

 

 

La Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI) con motivo de celebrarse el “Día Internacional de los Pueblos Indígenas” hace un llamado a los Estados para que en este día adopten políticas nacionales y mecanismos para la protección, reconocimiento y respeto pleno a los derechos indígenas, a los pueblos indígenas para solidarizarse en contra de todas las formas de exclusión y a fortalecer las luchas y alianzas para la construcción de Estados Plurinacionales con sociedades interculturales.

 

Somos una instancia de coordinación de las organizaciones indígenas de los Andes, constituida el 17 de julio del 2006 en la ciudad en la ciudad del Cusco e integrada por la Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador (ECUARUNARI), la Confederación Nacional de Comunidades del Perú Afectadas por la Minería (CONACAMI), el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (CONAMAQ), la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) y la Coordinación de Identidades Territoriales Mapuche (CITEM), cuyas organizaciones representan a 15 millones de indígenas andinos de los países de Ecuador, Bolivia, Perú, Colombia y Chile

 

Nos dirigimos a los Estados y la opinión pública internacional para expresar nuestra demanda de atención sobre los siguientes aspectos:

 

I. Reconocemos los avances en la promoción y la solidaridad internacional para reconocimiento de los derechos indígenas, como la reciente adopción de la Declaración de las Naciones Unidades sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU después de 20 años, por lo que llamamos a los Estados a refrendarla en la próxima Asamblea General de la ONU y adecuar las políticas nacionales para facilitar su aplicación en consulta con los pueblos indígenas y sus organizaciones.

 

II. Demandamos a los Estados y las empresas transnacionales el respeto de nuestro derecho al territorio y a los recursos naturales. Actualmente los territorios indígenas están siendo concesionados por los Estados a las empresas transnacionales para la extracción de los recursos naturales violando normas nacionales e internacionales que protegen los derechos indígenas; la invasión de territorios nos recuerda viejas formas de colonización para la extinción de los pueblos indígenas. Las concesiones forestales, mineras, petroleras, de agua, del mar, de gas y turísticas afectan nuestras formas colectivas de vida y el acceso a los recursos que se encuentran en territorios indígenas.

 

III. Denunciamos las constantes acciones de criminalización de la lucha indígena por parte de los Estados. Los indígenas asumiendo el mandato de nuestras comunidades, pueblos y nacionalidades hemos emprendido la resistencia y movilización social para la defensa de nuestros derechos ante la exclusión y el silencio de los Estados y los grupos de poder quiénes carentes de toda razón han recurrido a la represión violenta, la persecución y el enjuiciamiento de los líderes indígenas en toda la región andina, por lo que demandamos a la sociedad civil internacional a actuar para impedir la continuidad de estas formas coloniales de represión y a mantener especial atención por los indígenas mapuches enjuiciados por el Estado chileno y los indígenas quechuas enjuiciados por el Estado peruano por oponerse a la minería en sus territorios.

 

IV. Denunciamos la creciente militarización y la aplicación de “planes” del gobierno de Estados Unidos en los Andes con la única finalidad de respaldar la imposición de políticas neoliberales a los Estados andinos, como los TLC, y el saqueo de los recursos naturales por parte de las empresas transnacionales, por lo que llamamos a los pueblos indígenas y otros sectores sociales establecer alianzas para fortalecer las luchas por la soberanía nacional y autonomía indígena. Llamamos a la sociedad civil internacional a poner especial atención y actuar sobre la situación de los pueblos indígenas desplazados por la guerra interna en Colombia.

 

V. Llamamos al Estado de Chile y su presidenta, Michelle Bachelet, para la inmediata ratificación del Convenio 169 sobre Pueblos Indígenas de la OIT en concordancia con las tendencias globales de reconocimiento de los derechos indígenas y la inclusión en sus políticas nacionales de diversas recomendaciones por parte de instituciones internacionales de derechos humanos realizados al Estado chileno en los últimos años.

 

VI. Saludamos la instalación de la Asamblea Constituyente de Bolivia e instamos a los diversos Estados de la región a asumir la convocatoria a procesos similares de asambleas constituyentes para refundar los Estados – Nación actuales en Estados Plurinacionales como la única vía para la construcción de sociedades interculturales y la eliminación de todas las formas de exclusión y marginación contra los pueblos indígenas.


Primero las amenazas estaban dirigidas a universidades, centros y grupos de investigación, sindicatos, colectivos y a diferentes organizaciones sociales y de derechos humanos; pero poco a poco éstas se han ido especializando, y en el último e intimidatorio correo, los remitentes que se autodenominan como “Frente Democrático Colombia Libre”, dedicaron sus líneas a los medios de comunicación, asociaciones para la libertad de prensa, oficinas de comunicación y periodistas, claro sin dejar de lado a algunas organizaciones como el Colectivo de Abogados Alvear Restrepo, Codhes y la Organización Nacional Indígena de Colombia, como dicen por ahí, “como para no dejar”. Sin embargo queda claro en la comunicación, que esta vez el mensaje es para quienes por trabajo, tienen el difícil oficio de informar.

Los destinatarios del comunicado titulado “Mesa central de dirección nacional, Colombia libre de comunistas”, son en su mayoría las oficinas de comunicación e información de diversas organizaciones, medios alternativos de comunicación y asociaciones por libertad de prensa. Entre otros, los siguientes son algunos de los medios y organizaciones relacionadas con el ejercicio del periodismo, que recibieron las amenazas: Sistema de Información Etnias de Colombia, al que pertenece el periódico Actualidad Étnica; la Corporación Medios para la Paz; Prensa Rural; el Semanario Voz; Medios de la Unión Sindical Obrera, USO.

En la comunicación, se tilda a los destinatarios de “revolucionarios disfrazados de ongs, supuestos líderes, abogaduchos y comunicadores camuflados en la civilidad, escondidos detrás de sus columnas como si allí no los encontráramos”.

En una clara afrenta al derecho a la información y la libertad de prensa, contemplados en la constitución y en la normativa internacional, los remitentes anuncian que “a partir de ahora se las tendrán que ver es con nosotros, con una sólida presencia en más de la mitad del territorio colombiano, ahora libre de ese cáncer que son la guerrilla y ustedes”.

“Les hemos empezado a dar prueba de que no estamos jugando. Ahí les dejamos los tendidos de Barranca, por ahí hemos empezado, pero no tardaremos en entrar en acción en capitales como Barranquilla, Medellín, Cali, Bucaramanga, Cúcuta, Manizales, Pasto y Bogotá….a propósito de Bogotá, vamos a hacer unas vuelticas esta semana, haber que hacen, ¿seguir chillando?”, continúan en su intimidatorio mensaje, en donde nos declaran “objetivo militar”.

El mensaje que tiene como “Asunto” las siguientes direcciones electrónicas: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., finaliza con el lema “En pie de guerra a sangre y fuego contra la izquierda” y está firmado por “Colombia libre por siempre de comunistas”.

Cabe anotar que el mensaje llegó a las salas de redacción de estos medios, días después que reconocidos columnistas y periodistas de la ciudad de Barranquilla. Gustavo Bell Lemus director del Diario El Heraldo y ex vicepresidente de la República; Armando Benedetti Jimeno, columnista de los diarios El Tiempo y El Heraldo y ex ministro de Comunicaciones; y Ernesto McCausland, Director de Noticias de Caracol Radio para la Costa Atlántica y columnista del diario El Heraldo, recibieron cajas con amenazas y sufragios. Ante esta situación el Presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, no dudo en encargar al Director de la Dijín, General Óscar Naranjo, para que investigara los hechos, y ofreció una recompensa de 100 millones de pesos a quien suministre información que permita la captura de los responsables.

Si bien funcionarios del alto gobierno expresaron en reunión realizada con los embajadores del G-24 y representantes de la sociedad civil su rechazo a las recientes amenazas contra los defensores de derechos humanos y medios de comunicación independientes, y el Presidente dijo que “estas amenazas, como todas aquellas que atenten contra las libertades de prensa y expresión no pueden quedar en la impunidad”, tal pronunciamiento no se compadece con la celeridad y contundencia que actuó frente al caso del Heraldo.

A los medios de comunicación, independientes, alternativos, regionales, locales y comunitarios, también los amenazan, y lo que es más triste, también los asesinan. Alrededor de estos casos, además de la impunidad reina el silencio. Sin embargo algunos medios ya se han manifestado como el Sistema de Información Etnias de Colombia y el Periódico Actualidad Étnica, así como Prensa Rural y la Corporación Medios para la Paz.

El Periódico Actualidad Étnica (www.actualidadetnica.com) y el Sistema de Información Etnias de Colombia (www.etniasdecolombia.org), en un comunicado de prensa, expresó su condición de medio de comunicación independiente, especializado en los derechos de los grupos étnicos. “Nuestra principal apuesta es la de informar de manera objetiva y acorde a la ética periodística, sobre el acontecer y la realidad de los pueblos indígenas y demás grupos étnicos de Colombia. Hemos publicado diferentes artículos sobre casos de violación de los derechos humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario sobre estas comunidades, independientemente de quien los ejecute: guerrilla, paramilitares y fuerza pública. No entendemos, entonces, que ejercer nuestro oficio se nos califique como “revolucionarios y comunistas disfrazados”.

Solicitó a las autoridades competentes se investigue los orígenes y autores de estas amenazas y mensajes intimidatorios, dando una respuesta oportuna y tomando las medidas del caso en materia de protección y seguridad. En una comunicación dirigida a la Presidencia, Vicepresidencia, Ministerios de Defensa y del Interior, Procuraduría, Fiscalía, Programa Presidencial de Derechos Humanos y DIH y la Defensoría, exigió se garantice “la integridad física y emocional, para continuar con nuestro ejercicio profesional”. En ese sentido, demandó de la Fiscalía, inicié una investigación que determine los orígenes de las amenazas.

“A los organismos internacionales de Derechos Humanos, en especial a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y a los relatores especiales para los derechos humanos y la libertad de prensa, les rogamos tomar atenta nota de estos hechos y demandar del gobierno colombiano garantías. A los periodistas y medios de comunicación, pedimos su apoyo y solidaridad incondicional”. El llamado a las organizaciones de defensa de la libertad de prensa, asociaciones de periodistas, medios de comunicación masivos y alternativos fue el de “poner en conocimiento de la opinión pública, estos hechos que atentan contra el derecho de la información, la libertad de prensa y la inalienable libertad expresión, y que ponen en riesgo no sólo nuestra labor periodística, sino la vida de cada uno de nuestros colaboradores”.

Finalmente Actualidad Étnica dirigió un mensaje de solidaridad a los periodistas que por cuenta de su trabajo han sido víctimas de amenazas e intimidaciones y constricciones a la libertad de expresión.

Por su parte, Medios para la Paz, corporación que se dedica desde hace nueve años, a la “promoción y construcción de un periodismo responsable en el cubrimiento del conflicto armado, que garantice una ciudadanía mejor informada”, solicitó a la Fiscalía General de la Nación adelante las investigaciones respectivas, “pues consideramos que una sociedad libre e independiente es sinónimo de una sociedad democrática y tolerante”.

Medios para la Paz, organización que ha sido reconocida nacional e internacionalmente por su trabajo y que ha recibido entre otros, premios como el Catanluya a la Libertad de Expresión, se solidarizó con los otros medios y organizaciones que fueron objetos de las amenazas.